GEMMY CAVI
El que persevera alcanza, dice un refrán, que en este caso está muy bien dicho. Hay sueños que son posibles, sólo se trata de tener una meta y esforzarte por conseguirlo.
Es el caso de cuatro amigos de Argentina con Síndrome de Down, quienes al no encontrar oportunidades laborales debido a sus capacidades, decidieron crear su propio trabajo, convirtiéndose en un ejemplo a seguir de todo aquel que sienta que no puede lograr sus metas.
Los Perejiles
Los Perejiles, así lleva por nombre el negocio, fue creado por ese grupo de jóvenes argentinos que, cansados de ser reiteradamente rechazados en otras ofertas laborales por tener Síndrome de Down, encontraron en emprender una verdadera oportunidad para trabajar como cualquier otra persona.
A pesar de que vivimos en una sociedad que poco a poco toma conciencia y avanza respecto a la inclusión social, las personas con este síndrome aún se topan con muchas dificultades a la hora de buscar un puesto laboral.
Por lo general, esto se da independientemente del país y continente que se encuentren. Algunas empresas brindan oportunidades a personas con Sindrome de Down sólo porque se les otorga una bonificación por contar con colaboradores con discapacidad. Sin embargo, muchas de ellas no les dan verdaderas responsabilidades a la hora de desempeñarse laboralmente, es decir, les dan tareas menores o aquellas que no impliquen mucho esfuerzo. Esto es ocasionado por la falta de información que se tiene sobre las capacidades que poseen las personas con dicho síndrome.
De buscar empleo a tener su propio negocio
Aunque el panorama laboral para estos cuatro amigos con el síndrome no pintaba muy bien , no se echaron para atrás. Es así que tomaron la decisión de crear Los Perejiles, una pizzería con servicio de catering especializada en fiestas y eventos.
Creada en 2016, esta empresa fue su forma de decirle al mundo y a las empleadores que los rechazaban por tener habilidades especiales que tienen las mismas capacidades que cualquier otra persona. Motivados por su amor a la pizza y a las intensas ganas de seguir adelante, estos socios hoy disfruta de ser sus propios jefes. No más rechazos, ni tener que depende de terceros para poder laborar.
Todo esfuerzo da frutos
A veces cuando se cierra una puerta, se abre una ventana, o 200 de ellas. Y es que en su primer año, Los Perejiles realizaron 250 eventos llevando sus deliciosas pizzas y comida italiana tradicional a fiestas, bodas y otros eventos. La empresa al día de hoy no deja de recibir pedidos y de ser el vivo ejemplo del que el Síndrome de Down no afecta las capacidades de las personas.
El servicio de los Perejiles tiene la capacidad de atender a 600 personas en un único evento. Pasaron de ser cuatro jóvenes con un sueño a convertirse en un equipo de más de 20 integrantes, quienes una vez más nos demuestran que nosotros nos ponemos los límites, y que siempre hay una manera u otra de salir adelante.
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