STAFF / LIBRE EN EL SUR
Una ventaja de apenas tres puntos porcentuales sacó el bloque oficialista –que encabezó Morena– a la alianza opositora, en los comicios por las diputaciones federales, el 6 de junio, en que participó el 52.66% de los ciudadanos inscritos en la lista nominal de electores.
Efectivamente, 85 de cada cien votantes en las pasadas elecciones optaron por entrar en la disyuntiva de apoyar al presidente Andrés Manuel López Obrador o de rechazarlo. Solo un 7.27% se decidió por una “tercera vía”, al votar por Movimiento Ciudadano.
Lo demás se diluyó en los nuevos partidos, que terminaron convertidos en una pedacería que perdió el registro: PES, Fuerza por México y Redes Sociales Progresistas.
Son los resultados oficiales de la elección, que coincidieron con los conteos rápidos y el Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP), llevados a cabo por el Instituto Federal Electoral.
De acuerdo con esas cifras, donde ya se descuentan los votos nulos y las candidaturas no registradas, la suma de los porcentajes obtenidos por Morena (35.33%), Partido Verde (5.63%) y PT (3.36%) dio como resultado que 44.32% votó por refrendar en la Cámara de Diputados a la autollamada 4T.
Frente a ella, con estrechísima distancia, la coalición Va por México logró el 41.04% de la votación nacional. El Partido Acción Nacional obtuvo 18.90%, lo que lo reafirmó como la segunda fuerza política en el país, mientras el PRI consiguió el 18.37% de los votos y, muy lejanamente, el PRD se quedó con el 3.77%.
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