A pesar de presuntas irregularidades (y de la falta de información para votar), que tendrían como fin manipular la consulta ciudadana para llevar adelante el proyecto del Corredor Cultural Chapultepec, una nutrida participación ciudadana dio contundente “no” a Miguel Ángel Mancera y con ello uno de los mayores reveses en su periodo de gobierno.
El insólito ejercicio, realizado y avalado por el Instituto Electoral del Distrito Federal, dejó también al descubierto la falta de consenso frente a las mega obras del GDF, la mayoría de las cuales no han sido expuestas a una consulta ciudadana y se han impuesto bajo un modelo autoritario.
De acuerdo con los datos preliminares del IEDF, en las 75 mesas receptoras de opinión instaladas en la delegación Cuauhtémoc, se contó con la participación de 22 mil 370 votos, de los cuales, 14 mil 201 se pronunciaron en contra, mientras que 7 mil 893 se mostraron a favor del proyecto.
Durante la consulta, observadores acreditados por el IEDF denunciaron casos evidentes de acarreo, como en el caso de las casillas de las colonias Tránsito, San Rafael II, Santa María la Ribera II. En tanto que, en Santa María la Ribera IV y Obrera I, reportaron que el ejercicio se llevó a cabo sin incidentes. Por su parte, el IEDF informó sobre 60 anomalías reportadas, ninguna con denuncia formal.
En la casilla ubicada en la colonia Tránsito “interceptaban a la gente una esquina antes de la casilla, les daban un teléfono celular y al salir les daban 100 pesos”, describió Sandy Choreño, representante del colectivo No Corredor. Señaló que aunque solicitaron el apoyo de una patrulla, ésta fue increpada por un grupo de cinco personas, por lo que se retiró.
Vecinos en contra del Corredor Chapultepec consideraron que el resultado de la consulta fue gracias a que los ciudadanos salieron a defender su Ciudad, su dignidad, para impedir que el Distrito Federal quede en manos de las empresas inmobiliarias. “Le ganamos al acarreo”, expresaron en conferencia de prensa.
Manifestaron que el siguiente paso será decretar la moratoria urbana, puesto que la ciudad de México no puede continuar sin un programa de desarrollo urbano, así como que este tipo de consultas sean vinculatorias, o sea que sean las que determinen por ley cómo y hacia dónde se debe dirigir la Ciudad. “En conjunto vecinos, académicos y autoridades tenemos que trabajar para planear la Ciudad, porque no pueden seguir imponiendo proyectos inmobiliarios”, indicó Sergio González, vecino de la colonia Juárez.
Lo que sigue es una nueva propuesta para los asambleístas, que consiste en reducir el presupuesto a los organismos autónomos que tienen como función defender a los ciudadanos que, de acuerdo con Mayela Delgadillo, integrante del Comité Roma Norte III, no cumple, como en el caso del IEDF, la Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento Territorial (PAOT), la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CDHDF), el Instituto de Verificación Administrativa (INVEA), el Instituto de Transparencia.
A través de su cuenta de Twitter, el jefe de gobierno, Miguel Ángel Mancera escribió “respetamos el resultado de la consulta sobre el proyecto #CCChapultepec…”, mientras que vecinos del movimiento advirtieron que continuarán su lucha hasta que se cancele definitivamente la concesión.
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