10 de agosto. En el noticiero de las 13 horas que transmite la emisora MVS y que conduce Rocío Méndez, este martes se presentó la denuncia de los propietarios de un restaurante ubicado en la delegación Benito Juárez que acusan a un verificador de la DBJ, Miguel Ángel Garcés Gómez, y a su jefe, el licenciado Trillo, de intento de extorsión “por más de 30 mil pesos”.
Méndez relató que el hecho ocurrió el viernes pasado a las 10 de la noche, cuando Garcés Gómez se presentó en el establecimiento como verificador de la Dirección General Jurídica y de Gobierno de la DBJ, con credencial número L-20-01 y exigió una serie de documentos que acreditaran el legal funcionamiento del restaurante. Se le presentaron copias de tales documentos, pero las rechazó aduciendo que por no ser los originales no tenían ninguna validez. Entonces se le pidió tiempo para que los documentos originales fueran llevados y mientras tanto Garcés Gómez se dedicó a redactar el acta de visita con la intención de cerrar el establecimiento.
Cuando finalmente llegó la documentación original, el verificador de la DBJ se enojó y dijo que esa documentación se le debió haber presentado en el momento que se la solicitó, al llegar, y que ahora ya no servía de nada. Entonces dijo que lo iba a consultar, relató la conductora, y se comunicó con su superior, un licenciado de apellido Trillo, jefe de Verificaciones de la Benito Juárez. Ambos funcionarios comentaron a los propietarios que “hasta podía romperse el acta”, pero a partir de un “compromiso económico”, es decir –calificó Rocío Méndez—”una mordida, cochupo, dádiva” de más de 30 mil pesos. Como los restauranteros se negaron a aceptar la corrupción, los sellos fueron colocados en el exterior del restaurante.
El pasado 26 de mayo, durante una reunión con restauranteros y otros empresarios afectados por las obras de la ruta 12 del Metro en Benito Juárez, el jefe delegacional Mario Palacios recordó que su administración había llevado a la cárcel a dos malos funciuonarios, por extorsionadores. Advirtió enfático que en su administración “no toleraremos a funcionarios corruptos”, por lo que pidió la ayuda de los empresarios de giros mercantiles a denunciar cualquier intento de chantaje o extorsión. “Ayúdenme”, pidió Palacios a unos 300 comerciantes reunidos en el Salón Vertical de la DBJ.
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