Libre en el Sur

Describe González Gamio lamentable destrucción de la vieja Tacubaya en ciclo de la ex capilla de Guadalupe

La escritora, cronista, columnista e historiadora Ángeles González Gamio tuvo a su cargo el tema sobre la historia de Tacubaya y la lamentable destrucción de muchos de sus tesoros arquitectónicos a finales del siglo XIX y principios del XX, dentro del ciclo de Conferencias Magisteriales 2011 que organiza la Delegación Miguel Hidalgo en la excapilla de Guadalupe del Parque Lira.

González Gamio recordó que Tacubaya es uno de los pueblos más antiguos de la Ciudad de México y que su historia se remonta a la época prehispánica, donde se le conocía como Atlacuihuayan, que etimológicamente tiene dos significados: lugar donde se toma el agua, y lanza de dardos.. “Era una extensión enorme”, explicó al inicio de su ponencia Historia y Tradición; Paseo por la Historia de Tacubaya. “Abarcaba lo que hoy es la Condesa, Escandón, San Miguel Chapultepec, Observatorio, Daniel Garza y parte de las Lomas de Chapultepec”

Mencionó que Tacubaya tenía un acueducto, del que hoy día solo quedan algunos vestigios, y la atravesaban los ríos Becerra y La Piedad. A la llegada de los españoles, le cambiaron el nombre por Tacubaya y fue entonces cuando comenzó la construcción de molinos, villas y haciendas como la de la Condesa; además del cultivo de olivo, una de las principales actividades económicas de la época, junto con la producción del pulque y la crianza del gusano de seda. Durante los siglos XVI y XVII se construyeron importantes casonas, muchas de ellas de descanso como la “Casa de la Bola” (en la foto) y “La Casa Amarilla de Aranzain” (hoy, sede delegacional), también conocida como “Cinco Picos”, que tenían como característica principal sus techos altos, numerosos cuartos, patios, huertos y jardines.

Ante un público atento y participativo que colmaba el hermoso recinto recientemente restaurado, la cronista narró que en el siglo XVIII, por mandato del arzobispo y virrey Juan Antonio de Vizarrón y Eguiarreta, se construyó el Palacio Arzobispal, con huertas frutales y olivares. Posteriormente se donó parte del terreno a los pobladores étnicos para cultivo. En la época de Benito Juárez, en la Guerra de Reforma, fuerzas republicanas y conservadoras se enfrentaron en la ciudad de México; las primeras sufrieron derrota y en consecuencia, por órdenes de Miguel Miramón, el general Leonardo Márquez fusiló a sobrevivientes en terrenos del Arzobispado de Tacubaya, entre quienes había oficiales, médicos, enfermeras y habitantes del lugar, quienes fueron enterrados en un panteón, el cual fue destruido al ampliarse la Av. Revolución. Por esta acción al general Márquez se le conoció como “Tigre de Tacubaya”, y a las víctimas los “Mártires de Tacubaya”.

Luego de la Independencia de México, se fraccionaron los terrenos y comenzó una división en la extensión de Tacubaya, que dio paso a la formación de las colonias Escandón, Condesa, Observatorio y San Miguel Chapultepec. “A finales del siglo XIX y durante el XX se destruyeron diversas casas y villas, de las cuales sobreviven actualmente la ‘Casa de la Bola’ y ‘La Casa Amarilla’, por lo que debemos de cuidarlas y preservarlas porque son testigos valiosos del esplendor de Tacubaya”, concluyó la escritora González Gamio, quien interactuó con los asistentes y apoyó su ponencia con una lectura de la crónica escrita por la Marquesa Calderón de la Barca donde se describe la forma de vida de los habitantes de Tacubaya, así como las casas, haciendas y villas en el siglo XIX.

José Alfredo Reynoso Ruíz, director ejecutivo de Cultura de la Delegación Miguel Hidalgo, entregó a Ángeles González Gamio, un reconocimiento por su valiosa participación en el ciclo de “Conferencias Magistrales 2011, Patrimonio, Arte e Historia”. La próxima Conferencia Magistral, “La Ciudad de México en el siglo XIX”, se realizará el jueves 18 de agosto a las 7 de la noche, en el Centro Cultural Ex Capilla de Guadalupe, dentro del Parque Lira.

Compartir

comentarios

Salir de la versión móvil