En la alcaldía Benito Juárez se ubican cinco de los ocho museos que existen en estaciones del Metro de la CDMX. Te invitamos a un recorrido espectacular por la selva, la radio, la caricatura, la música y el propio STC, que este año celebra su 50 Aniversario.
STAFF / LIBRE EN EL SUR
Incursionar en el fabuloso mundo de la caricatura, viajar a través de la selva lacandona, experimentar la magia de la radio y repasar su historia, pasar revista a los más destacados compositores mexicanos y conocer pormenores de la historia del Metro de la Ciudad de México, que cumple justo 50 años.
Cinco diferentes museos, todos interesantes y todos gratuitos, existen en estaciones del Sistema de Transporte Colectivo ubicadas en el perímetro de la alcaldía Benito Juárez, que así ofrece una riqueza adicional poco conocida. El recorrido, que puede hacerse por supuesto a través de las líneas 3 y 12 del Metro, nos permite una visión muy diferente de nuestra ciudad y nuestro país.
En honor del festejado, podemos empezar en la estación Mixcoac (línea 12) con el museo dedicado precisamente al transporte inaugurado hace medio siglo, el 4 de septiembre de 1969. Ahí está documentado el origen del Metro, a través de los planos de la línea 1 y el trabajo de especialistas como Lance Wyman y Wolf von Eckardt que diseñaron el logotipo, la simbología y la iconografía de las primeras estaciones del Sistema.
Una maravillosa colección de boletos nos permite repasar las diferentes etapas del Sistema a lo largo de cinco décadas. Hay fotos y una singular colección de piezas arqueológicas, fundamentalmente vasijas y otros objetos cotidianos, rescatadas durante las excavaciones de la construcción de los subterráneos, además de una tienda de suvenires.
Un estadillo de ingenio invade permanentemente el túnel que conecta las líneas 3 y 12 del Metro en la estación Zapata y colma paredes, techo y hasta las escalinatas: es el Museo de la Caricatura, donde están presentes con sus trabajos los integrantes de esa pléyade inigualable de moneros mexicanos, reconocidos en el mundo.
Ahí se asoman artistas como Rafael Freyre y Ernesto García Cabral, Abel Quezada y Gabriel Vargas, Posada, Rossas, Rius, Carreño, Naranjo, Aragonés, Matta, Iracheta, Magú, El Fisgón, Helioflores, Alberto Issac… Hay una sala de consulta y una tienda.
Tiene además un complemento en el vestíbulo de acceso a la Línea Dorada, custodiada por la Familia Burrón, con retratos del general Emiliano Zapata realizados por caricaturistas, así como una exposición de fotografías del Caudillo del Sur.
Y de ahí saltamos al mundo de la Radio, en la estación Parque de los Venados (Línea 12). De lo más interesante es una cronología que describe la historia de ese medio de comunicación, desde sus antecedentes a principios del siglo pasado, hasta nuestros días.
Hay una colección de locutores de todo el mundo así como otra de radio receptores (incluidos los legendarios aparatos de bulbos), consolas de transmisión, grabadoras, fonógrafos y discos de acetato, así como un micrófono y el histórico xilófono de la XEW, que son verdaderas reliquias. Y una verdadera cabina de transmisión, completa, que funciona.
Incursionar por la selva Lacandona de nuestro estado de Chiapas es una muy grata experiencia, sobre todo sin necesidad de salir de la estación Viveros de la línea 3. Ahí se reproduce el ambiente selvático a través de denso follaje (que incluye un enorme tronco), y ejemplares de especies animales que sobreviven en aquellos parajes y que son descritos en una galería: aves como la guacamaya, el águila Arpía y el loro, monos como el Araña y el Saraguato, mamíferos como el ocelote, el tapir y el tigrillo, insectos como la mariposa o grandes reptiles como el cocodrilo. Y se enseña ahí a niños y adultos la importancia de conservar esas riquezas naturales.
Finalmente arribamos, en la estación División del Norte (línea 3), al Museo de los Compositores, dedicada a esa veta inagotable de músicos mexicanos. En una gran vitrina se presentan fotografías y objetos personales de quienes han encabezado la Sociedad de Autores y Compositores (SACM), como Alfonso Esparza Oteo (1945 y1946) Juan B. Leonardo (1946-1948), Gonzalo Curiel (1951-1952 y 1957-1958, Consuelo Velázquez (1968-1982), Roberto Cantoral (1983-2010) y el presidente actual, Armando Manzanero.
Hay diplomas y reconocimientos, portadas de discos, efectos personales como un chaleco de Rigo Tovar, y adicionalmente un karaoke donde el público puede interpretar las canciones famosas de todos los tiempos: ¡hay más de tres mil! En un túnel de salida existe una inacabable galería de fotografías de compositores, que se pierden en la distancia… y en el tiempo.
comentarios