ALI FIGUEROA
Ante la implementación de programas de aprendizaje en casa para todos los niveles educativos en diversos países, especialistas y organizaciones alertan que la falta de computadoras, acceso limitado a Internet, así como restricciones en la modificación y adquisición de equipos, han generado un problema en materia de educación, al impedir que muchas familias dispongan de los recursos necesarios para migrar a las clases online.
La digitalización de plataformas ha alcanzado un punto importante en respuesta a la contingencia sanitaria por Covid-19, ya que la educación a distancia es el modelo elegido por las principales instituciones educativas, como en el caso de la Secretaría de Educación Pública (SEP), a través de su servicio de clases online, Aprende en Casa. Sin embargo, existen limitaciones y carencias importantes respecto a la adquisición de equipos de cómputo y acceso a Internet.
De acuerdo con la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE), México se encuentra en último lugar en educación online, debido a los costos elevados en los servicios de Internet, y poca o nula accesibilidad a los equipos de cómputo para millones de personas en el país.
Respecto a Estados Unidos, Associated Press reportó que escuelas en todo el país experimentan una falta de suministros electrónicos, tales como laptops, tablets, monitores, y repetidores de Internet. Según las empresas de computadoras con el mercado más grande de la región, Lenovo, Dell y HP, en territorio estadounidense se reporta una falta de suministros de hasta 5 millones en computadoras personales y dispositivos afines.
Por su parte, en Hong Kong, 75% de las familias de escasos recursos no tienen acceso a Internet ni cuentan con la capacidad económica para adquirir equipos electrónicos, según un estudio realizado por la Alianza por el Desarrollo de Derechos para la Infancia. Frente a esa situación, diversas familias reportaron compartir teléfonos móviles y equipos de segunda mano destinados al servicio de cibercafés y bibliotecas.
Con objeto de ofrecer oportunidades para las personas sin acceso a estos servicios, iniciativas como “Dona una tablet para alumnos de bajos recursos”, propuesta por Fundación UNAM, buscan mitigar en la medida de lo posible las carencias más inmediatas, y agilizar los procesos de inscripción y aprendizaje al brindar equipos electrónicos a la población.
Asimismo, la Red en Defensa de los Derechos Digitales (R3D), y otras organizaciones en pro de los derechos digitales y contra la censura de Internet, realizan un esfuerzo por revocar las modificaciones a la ley de derechos de autor que impiden intervenir y reparar equipos de cómputo, en tanto esta iniciativa obliga a las familias a buscar reparaciones con proveedores oficiales, a través de canales saturados por la pandemia, dificulta adquirir equipos de segunda mano, y genera una serie de gastos que no pueden solventar debido a las desigualdades económicas y sociales.
El regreso a clases durante la nueva normalidad requiere una cooperación entre las instituciones educativas, gobiernos y fundaciones con iniciativas de interés social, ya que existe una barrera importante en la adquisición de equipos electrónicos y acceso a Internet, que impide a una gran parte de la población aprovechar la digitalización de los servicios educativos y migrar a las clases en línea.
NOTIPRESS
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