Dos meses antes de lo planeado, fue abierta al tráfico vehicular la rampa de descenso del puente de Molinos hacia avenida Revolución sur, que libra los cruces semaforizados de avenida Molinos, Eje 7 Sur y la calle Castañeda, lo que significa un importante alivio al conflictivo tránsito en esa área de la delegación Benito Juárez.
A una hora insólita, pasadas las 10 de la noche de este jueves 18, el jefe de Gobierno del DF, Miguel Ángel Mancera, inauguró la obra que significó apenas cinco meses de trabajo, lo que el propio funcionario consideró un “tiempo record”
La rampa mide 472 metros de longitud y tiene dos carriles que permitirán el paso continuo de 400 mil vehículos sobre avenida Revolución. Permitirá reducir el tiempo de paso hasta en 30 minutos al evitar un paso conflictivo donde conviven microbuses y camiones y hay tráfico continuo por la presencia de un mercado.
Mancera, a quien acompañó el secretario de Obras y Servicios del gobierno capitalino, Edgar Tungüí agradeció a los vecinos, a las vecinas de la zona, también agradecemos por supuesto su apoyo porque como saben todos estos proyectos siempre tienen algún punto en donde se generan molestias, nosotros hoy reconocemos el apoyo de toda la comunidad, de toda la vecindad de esta zona”.
Respecto al deprimido de Mixcoac, el mandatario capitalino, enchamarrado por el clima frío, dijo que estará terminado en el 2017. “Nos faltaría concluir el deprimido, se está trabajando en la parte de Tlalpan y estaremos trabajando próximamente ya en la parte subterránea y calculamos estar concluyendo esto en 2017 más o menos”. La rampa quedó en servicio inmediatamente.
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