Bajo la consigna de que renuncie la secretaria del Medio Ambiente del DF, Tanya Müller, a la que acusan de “ecocida”, vecinos que participan en el movimiento contra un deprimido vial en Río Mixcoac colocaron este primer sábado de primavera decenas de cruces de madera junto a los restos de árboles que fueron talados por empleados del GDF en el camellón de dicha arteria a fin de dar paso a la obra.
En la parte cercana a la avenida Insurgentes Sur, los manifestantes sembraron además cedros. “Esta es una especie permitida, protegida además por la Ley de Salvaguarda, así que no pueden tener pretextos para quitarlos”, advirtió Gloria Soler, una de las vecinas que organizaron el evento.
En algunas cruces se escribió para recordar la especie del árbol del que se trataba, como por ejemplo acacia, pino o fresno, ésta última considerada “monumento urbanístico” de la ciudad de México, por lo que la ley prohíbe expresamente su derribo. De acuerdo con el inventario del GDF de los 855 árboles que se pretende talar para construir el deprimido, del que Libre en el Sur tiene copia, casi la mitad de ellos son fresnos.
Algunos de los tocones de los árboles derribados tienen pintadas caritas tristes, realizadas por niños que acudieron al sitio la semana pasada junto con líderes cívicos y políticos, entre ellos Leticia Varela. El grupo de “Los supercívicos” publicó en redes sociales un video en el que presenta esa protesta y critica con sarcasmo al jefe de Gobierno Miguel Ángel Mancera. Para verlo aquí:
comentarios