Mide más de 18 metros y es uno de los más viejos de la demarcación.
El árbol, llamado El Abuelo por los vecinos, está ubicado sobre la acera en la calle Tejocotes, a la altura del número 75 y supera el edificio de cuatro niveles que ahí se levanta; recibió poda de control.
STAFF/LINBRE EN EL SUR
Personal de la alcaldía Benito Juárez llevó a cabo este lunes una “poda controlada” a un fresno de más de 18 metros de altura, considerado uno de los más antiguos de la demarcación, en la colonia Tlacoquemécatl del Valle.
El Fresno arbóreo se encuentra en perfectas condiciones, pero como todos los árboles debe ser podado de manera regular, conforme un instructivo preciso para evitarle daños.
El árbol, llamado El Abuelo por los vecinos, está ubicado sobre la acera en la calle Tejocotes, a la altura del número 75 y supera el edificio de cuatro niveles que ahí se levanta.
Una cuadrilla de trabajadores, auxiliada por una grúa, inició los trabajos luego de que el tramo de la calle Tejocotes, entre Miguel Laurent y Magnolias, fue cerrado a la circulación.
Los operarios cortaron con sierras eléctricas varias gruesas ramas del árbol, que bajaron con la ayuda de la grúa, para luego seccionarlos ya en el piso y subirlos a un transporte de la propia Alcaldía.
La poda controlada consiste en la retirada de ramas secas, rotas o entrecruzadas. Y está pensada para incrementar la oxigenación de la copa y ayudar al crecimiento del árbol. Evita también la caída de ramas en fuertes temporales ya que el árbol ejerce menor resistencia al viento una vez la poda está realizada.
Según los operarios encargados, la poda debe cuidar el equilibrio de peso entre las diferentes partes del árbol, considerando el peso estimado de las ramas más gruesas y largas. Más que el follaje propiamente dicho.
Explicaron que esta tarea se realiza de manera permanente en Benito Juárez, tanto para preservar las especies arbóreas como para evitar accidentes por la caída de ramas o de árboles completos.
El abuelo se encuentra a sólo media cuadra del parque San Lorenzo, donde un también muy antiguo pirú, conocido como El Guapo, cayó debido a una tormenta hace casi una década y sobrevivió de manera sorprendente, hasta la fecha.
Según el portal especializado Bio Especie, lo aconsejable es podar el fresno entre finales del invierno y comienzo de la primavera, precisamente como ahora, cuando este árbol se encontrará en reposo vegetativo.
Si lo que se busca es que, a comienzos de la primavera, el fresno se encuentre sano y vigoroso será necesario eliminar sus ramas dañadas, enfermas o secas. Al quitar estas ramas, se logra reducir las posibilidades de que el fresno contraiga enfermedades. Además, se limita el desarrollo de plagas.
El fresno común es un hermoso árbol cuya principal característica son su follaje caducifolio y sus grandes dimensiones. Su altura habitual oscila entre los 8 y 12 metros, aunque no es difícil encontrar ejemplares cuya altura alcanza los 20 metros. Su tronco es bastante duro, recto y fuerte. En cuanto a sus ramas, estas tienen un follaje bastante denso con amplia copa.
Para que se pueda disfrutar plenamente de los fresnos es necesario conocer sus necesidades siendo diferentes según su ubicación, por ello, la poda y cuidados del fresno siempre debe ser realizada por personal cualificado.
Al igual que para el resto de especies, dicen los expertos, la poda de árboles es fundamental para su correcto desarrollo. Sin embargo, una poda inadecuada, como frecuentemente ocurre, puede ser fatal para el individuo arbóreo, que inclusive se puede secar y morir.
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