STAFF / LIBRE EN EL SUR
La batucada y el mariachi irrumpieron estridentes en plenas oficinas administrativas de la Torre corportaiva de Pemex y en día laboral, donde esta mañana se dieron cita unos 200 agremiados de la sección 34 del sindicato petrolero comandado por Carlos Romero Deschamps.
El festejo –en el que se repartieron tamales, café y atole– se da en medio de la llamada “austeridad republicana” y de diferentes señalamientos a Carlos Romero Deschamps por parte de una nueva asociación sindical disidente, el Frente Petrolero Nacional.
Foto: Especial
Justo el 15 de julio pasado, Sergio Carlos Morales Quintana presenté ante la Fiscalía General de la República lo que calificó como “pruebas” de acciones fraudulentas por parte de Romero Deschamps.
En los costados de los edificios que delimitan el convivio matutino por los 71 años del sindicato, hay decenas de mantas en las que se agradece a Romero Deschamps la “exitosa” revisión que llevó a cabo recientemente con el gobierno de López Obrador.
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A inicios de mes, pesar de la situación crítica por la que atraviesa la empresa, Pemex emitió un comunicado oficial en que se congratulaba por el acuerdo con el sindicato: “En el marco de la revisión salarial y tomando en consideración el proyecto de rescate de la empresa de los mexicanos, se pactó un incremento al salario ordinario del 3.37%, así como del 1.80% para prestaciones”.
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Al principio de la administración, Romero Deschamps ofreció su apoyo a López Obrador, incluso en desplegados de prensa, gesto que agradeció el Presidente.
El sindicato del Romero Deschamps llamó al gobierno a crear “una nueva relación” y así aumentar la productividad. En el marco del combate al huachicoleo, afirmó que sí hay gasolina y explicó que por la limpia de corrupción en Petróleos Mexicanos (Pemex) se está afectando temporalmente al consumidor. “El gobierno está haciendo lo correcto. El sindicato petrolero apoya el cambio”, expresó.
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En el acuerdo laboral con el gobierno, apenas iniciado agosto, se pactó “armonizar” los gastos de la empresa hacia la dirigencia sindical, con el marco de austeridad del gobierno federal.
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