Las dos losas de la obra negra de una construcción irregular dentro del Parque Hundido ya fueron demolidas por trabajadores del gobierno capitalino, y sólo queda pendiente la remoción de escombros; eso, cuando faltan siete días para que el jefe de Gobierno Marcelo Ebrard dé a conocer los resultados de una investigación sobre los funcionarios que permitieron levantar ahí un edificio de departamentos.
La Secretaría de Obras del Distrito Federal informó que la demolición va “en tiempo y forma” para que el 15 de noviembre próximo concluyan esos trabajos con la plena integración de ese predio al parque y la implementación de una rampa de acceso para adultos mayores y discapacitados. La demolición y la nueva infraestructura tendrán un costo cercano al millón de pesos.
El pasado 29 de septiembre el jefe de Gobierno dio el banderazo para la destrucción de la obra negra el pasado 29 de septiembre, pero reconoció que no será suficiente la integración de ese predio al parque, sino que es necesario conocer a los nombres y actuar legalmente contra quienes solaparon tales abusos. Informó que para tal efecto ordenó una investigación, cuyos resultados se darían a conocer en un mes; es decir que el plazo vence en una semana.
Como se publicó en la más reciente edición impresa de ‘Libre en el Sur’, este periódico dio a conocer hace 23 meses que en el predio ubicado en Millet 72 de la colonia Extremadura Insurgentes se comenzaba a demoler una casa de los años cincuenta. Los propietarios no contaban en ese momento con licencia de demolición, aunque más tarde se la concedió el gobierno del entonces delegado Germán de la Garza Estrada. No lo debió hacer: Por su valor artístico se trataba de una casa protegida por el Instituto Nacional de Bellas Artes.
‘Una cuadrilla de trabajadores inició esta mañana, apresuradamente, la demolición de la llamada ‘Casa del Parque Hundido’, en la calle Millet número 72 de la colonia Insurgentes Extremadura, sin que se exhiba el permiso correspondiente ni haya un responsable de la obra, publicó Libre en el Sur en su primera nota sobre el tema, el 19 de noviembre del 2008 . Dicha construcción que data de los años cincuentas del siglo pasado es emblemática de la zona, pues está materialmente metida entre los árboles del parque Luis G. Urbina, conocido como Hundido. Tiene dos pisos de construcción y un frontón adjunto en el que hasta hace poco concurrían habitualmente jugadores de ese deporte’.
La DBJ dio la autorización FBJ-0811-08 para que la casa fuese reducida a escombros (Oficio 2119/09, expedido por su Oficina de Información Pública el 6 de agosto de 2009, con copia para el delegado De la Garza). Y además concedió otras dos autorizaciones –la FBJ-0896-08 y la FBJ-0072-09— “para ampliación y modificación”, cuando curiosamente también la dio para “obra nueva” (1/2862/70). En otro documento (2179/09), emitido apenas siete días después –el 13 de agosto del 2009—, la Dirección de Obras y Desarrollo Urbano delegacional reconoció que la propiedad de Millet 72 estaba catalogada “como inmueble con valor artístico por parte del Instituto Nacional de Bellas Artes”. Ese documento también llevó copia para el delegado, quien diez días antes declaró al periódico Reforma: “Lo único que puedo decir es que hasta la fecha no teníamos ninguna cuestión irregular en esa obra”. Habían pasado nueve meses desde la denuncia publicada en Libre en el Sur.
Luego siguió la historia: Con documentos “apócrifos”, según ha acusado la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda del DF, se pretendió construir un edificio de seis pisos para departamentos de lujo, cuya manifestación ingresó la DBJ. La Secretaría del Medio Ambiente clausuró la construcción a la mitad, por no contar con manejo de residuos. Una intensa movilización ciudadana, encabezada por la asociación Vecinos del Parque Hundido, obligó a que el Gobierno del DF concretara en junio pasado la compra del inmueble, la mitad pagada con recursos de la delegación.
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