Tras concluir el mandato que mis vecinas y vecinos me dieron para representarlos como diputada local por el Distrito XVII de la delegación Benito Juárez, puedo asegurar que los logros obtenidos estuvieron basados principalmente en la confianza que me brindaron día a día.
Desde el inicio de mi gestión como representante popular, implementé las jornadas “Tu Diputada en Tu Colonia”, logrando atender a más de 15 mil vecinos en 116 ocasiones; dimos 2 mil 500 asesorías jurídicas, revisamos 260 casos de cobro excesivo del predial y se realizaron 51 jornadas específicas de desazolve.
Mientras que con el programa “Porque tu salud es importante”, se otorgaron consultas médicas generales a 3 mil juarenses; 2 mil 600 recibieron servicios dentales, 9 mil vecinas y vecinos recibieron lentes gratuitos, gracias al programa “Ver Bien, Sí es Saludable” y 3 mil 500 mujeres pudieron realizarse mastografías totalmente gratuitas.
Además de las 5 mil 600 gestiones que se iniciaron en el Módulo de Atención, Orientación y Quejas Ciudadanas, también tramitamos reuniones con autoridades del Gobierno del Distrito Federal, entre ellas 61 recorridos en diferentes colonias, 316 reuniones vecinales y 47 reuniones de trabajo con funcionarios que escucharon sus demandas vecinales.
Asimismo solicitamos a las autoridades competentes 96 verificaciones a diferentes construcciones y establecimientos mercantiles, siendo éstos algunos de los temas que más afectan no sólo la tranquilidad, sino también el patrimonio de mis vecinos en la delegación Benito Juárez.
En tanto en la Comisión de Derechos Humanos de la Asamblea Legislativa que presidí, logramos heredar un marco legal que armoniza la normatividad local con el mandato constitucional de promover, respetar, proteger y garantizar sus derechos humanos de manera transversal y en los términos progresivos de exigibilidad.
Hoy tenemos en las leyes temas relevantes como la protección de trata de personas, el derecho a la lactancia materna para prevenir desde el nacimiento la obesidad y los trastornos alimenticos, la inclusión de los términos homofobia, lesbofobia, transfobia, xenofobia; reformas en contra del abuso y el maltrato de niñas, niños y adolescentes, además de la ley que reconoce los derechos de las y los jóvenes en el DF: en materia de salud, salud sexual y reproductiva, de desarrollo social, educación, empleo y participación ciudadana, entre muchas otras normatividades.
Por todo lo anterior agradezco infinitamente la confianza otorgada para que su voz fuera escuchada no sólo ante las autoridades que ustedes requerían, sino principalmente en la más alta tribuna de la Ciudad de México, así me lo pidieron y era mi deber cumplirles. Hasta siempre.
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