La defensa ciudadana del Poliforum Siqueiros
Fragmento de la intervención en el Foro Ciudad, patrimonio y mercado inmobiliario. La defensa del patrimonio de la ciudad desde la ciudadanía.*
VIVE BJ
Es necesario hablar de la defensa del Poliforum desde un piso de realidad: El Poliforum Siqueiros es propiedad legítima de la familia Suárez. Manuel Suárez fue uno de los accionistas del desarrollo, en el Parque de la Lama, del Hotel de México como centro financiero y de un centro cultural, en lo que es ahora el Poliforum Siqueiros.
La historia corta es que Suárez contrató a Siqueiros para hacer unos murales. Siqueiros diseñó el Foro Universal, de 11 metros de altura, cuya bóveda mide 900 m2, y construyó en su interior el mural La Marcha de la Humanidad. En el exterior, doce murales de gran formato y uno más en la bóveda exterior del Poliforum.
El conjunto se inaugura en 1971 y nueve años después (el 18 de julio de 1980) se expide un decreto presidencial que declara monumento artístico toda la obra de David Alfaro Siqueiros, “sean de propiedad nacional o de particulares”. El Poliforum es un inmueble de propiedad privada que alberga patrimonio cultural de la nación.
Por ello, es buen ejemplo de un conflicto entre derechos: la propiedad privada y el patrimonio público, histórico, arquitectónico, artístico y cultural. La defensa del Poliforum supuso profundizar en cada una de las aristas.
En la dimensión del mercado inmobiliario, el terreno del Poliforum Siqueiros se ubica dentro de un corredor inmobiliario importante, el de Insurgentes. El terreno, de poco más de 8,200 metros cuadrados, suponía en 2014 un valor de casi 361 millones de pesos. Pero el Poliforum ocupa poco más del 40% del terreno (3,500 metros cuadrados).
Un desarrollo inmobiliario como el que se pretende construir, de 80,300 metros cuadrados, suponía en 2014 un negocio de más de 3,500 millones de pesos (44 mil m2 a la venta). Actualmente, el precio ponderado de renta mensual en el corredor Insurgentes está valuado en dólares: 24.5 al mes por metro cuadrado. Significa un ingreso cercano a los dos millones de dólares al mes.
En términos de construcción de ciudad, el valor cultural del Poliforum no está solamente en el mural más grande del mundo que alberga en su interior, sino que todo, murales interiores y exteriores, incluido el muro perimetral, constituyen un discurso filosófico y artístico que haríamos bien en revisitar, en esta ciudad cuya concepción urbana ha relegado al ser humano su condición más ínfima.
En el Poliforum Siqueiros, en su dodecaedro, convergen dos pensamientos, dos voluntades: la de Suárez y la de Siqueiros, que comprendieron al ser humano en su integralidad, con su pasado y su futuro, y en esa convergencia construyeron un espacio urbano que armonizara el desarrollo económico con el desarrollo artístico y cultural.
Todo eso y más es el Polyforum Siqueiros. La preocupación alrededor de su futuro condensa también una realidad que vivimos los juarenses: el abandono del patrimonio histórico y cultural, riqueza pública, en favor del crecimiento de desarrollos inmobiliarios y comerciales, privados.
Lo decimos una vez más: no estamos en contra del desarrollo urbano o comercial de la ciudad: entendemos la dinámica de las urbes modernas, las necesidades de inversión y de crecimiento económico. De lo que sí estamos convencidos es que ese crecimiento no puede darse a costa de los lazos identitarios, del tejido social, del compromiso con el entorno que dan el arraigo y la pertenencia.
Con la pérdida del sentido de lo público se pierde el sentido de ciudad, que no es un conjunto de calles y edificios, sino personas haciendo cosas, en los espacios públicos, en los espacios de todos, en los espacios comunes.
Voy a concluir citando dos versos del poema que le escribió Neruda a Siqueiros, cuando estuvo encarcelado en Lecumberri: He visto tu pintura encarcelada / que es como encarcelar la llamarada.
¿Ese queremos que sea el destino de la obra magna de Siqueiros? ¿Una llamarada encarcelada en un lobby, en un centro comercial?.
*Organizado por el Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades, la Facultad de Arquitectura, el Instituto de Investigaciones Sociales y el Programa Universitario de Estudios Sobre la Ciudad.
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