La Jefa de Gobierno comparte un recorrido virtual por la casa que renta en la colonia Toriello Guerra, en Tlalpan
Promete que hará “un live” con Jesús, su pareja, a dúo de guitarra. Muestra sus plantas, sus fotos familiares y sus libros; y un pequeño comedor con sillas de acrílico.
STAFF / LIBRE EN EL SUR
En el último día que –ella espera– que tenga que estar encerrada por el Covid-19 que la aqueja, la Jefa de Gobierno rompió su propio estilo y abrió, en enlace directo con el público el departamento en el que vive pagando una renta y que ella misma definió como “modesto”.
Efectivamente, de lo mostrado a través de redes sociales aparece que el piso en la colonia Toriello Guerra, en la alcaldía Tlalpan, cuenta con un comedor austero con sillas blancas con asientos de acrílico que incluso queda pequeño en una estancia que termina en una sala y donde luce un librero de madera natural retacado de ejemplares. “Aquí es donde me ven en mis conferencias”, recuerda.
Sheinbaum abrió esta parte de su vida privada en plena carrera contra el canciller Marcelo Ebrard, que apenas se llevan un palmo de terreno en las encuestas, para lograr la candidatura presidencial de su partido. Así, incluso mostró los libros que está leyendo, uno de Octravio Paz sobre Sor Juana Inés de la Cruz, así como volúmenes de Jorge Zepeda Patterson y Jairo Calixto Albarrán.
En su mensaje, compartió que vive con su pareja en una “pequeña” unidad habitacional de la alcaldía de Tlalpan y que su “pequeño” departamento, que tiene su “balconcito”, consta de una “pequeña” sala, un “pequeño” comedor y el “pequeño” estudio en el que trabaja Jesús y donde realiza normalmente sus conferencias de prensa.
También presumió su guitarra, que Jesús, su pareja, le compró en el centro, y contó que suelen tocar los domingos por la tarde. Y salió al balcón para hacer una panorámica de “la pequeña unidad en la que vivo”, que en realidad es un conjunto habitacional de clase media. Incluso compartió la imagen de sus macetitas con flores.
Por lo demás, dejó ver fotografías familiares, de sus hijos y de sus padres, y unos cuantos cuadros de arte, de su hijo Rodrigo y del reconocido pintor Mario Núñez, además de su “bordado”.
“Es (un departamento) sencillo como ven”, recalcó Sheinbaum, que informó que vive ahí desde hace cinco años.
A diferencia de su habitual aspecto adusto, y a pesar de la enfermedad, Claudia Sheinbaum se mostraba cordial y serena, cuando no sonriente ante la pantalla de su teléfono celular, que es lo que utilizó para hacer el recorrido virtual.
La transmisión duró alrededor de 15 minutos, respondió preguntas y comentarios y se opuso a comentar “algunas barbaridades”. La mandataria capitalina priorizó sobre la política una duda relativa a los conciertos que habrá en el Zócalo y confirmó la presencia de Los Ángeles Azules para fin de año.
Leyó un comentario de alguien de quien no dio el nombre pero que expresó que “ojalá todos pudiesen acceder a una vivienda digna”, a lo que ella dijo coincidir “plenamente”, y que “por eso luchamos, para que todos podamos acceder a los mismos derechos”.
Reconoció que las conferencias de prensa están muy alejadas de la gente, por lo que este no sería el último “live”, y que además ya tiene la idea de compartir un concierto tocando a guitarra con Jesús. “Tenemos un repertorio de 10 canciones que cantamos y cantamos una vez y otra vez”.
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