Ni en el Centro Médico Nacional funcionan los equipos
Documenta ‘Reforma’ cifra alarmante: Demoran en IMSS hasta 11 meses para aplicar radioterapias
STAFF / LIBRE EN EL SUR
La destanción a los enfermos de cáncer es ya, de manera documentada una prueba más del fracaso en el sistema de salud en los tiempos de la llamada Cuarta Transformación.
Al evidente colapso sufrido ante la pandemia de Covid-19, donde se sufrió –además de la falta de cobertura pública las ocurrencias de los funcionarios de la Secretaría de Salud– se suma lo que el periódico Reforma consigna este domingo en su primera plana: El IMSS es incapaz de atender a los enfermos de cáncer.
Según reconocimiento del propio Instituto, en el Programa Nacional de Adquisición de Aceleradores Lineales, 2024, hay obsolecencia de equipos, prinicpalmente en la zona centro, occidente y norte del país.
Ello, cuando el IMSS es una institución tripartita, que cuenta con recursos aportados por las empresas y sus empleados.
Ese instituto tiene 10 unidades que supuestamente cuentan con servicios de radioterapaia a nivel nacional, con 30 aceleradores lineales de diferentes energías y/o características para atender a los pacientes con cáncer. Pero el Instituto ha urgido la sustitución de 12 de esos equipos en 2024, cuyo costo equivale a 2 mil millones de pesos.
“Muchas veces porque los equipos están fuera de servicio, ya que las refacciones o la actualización de software son de difícil acceso y los provedores no pueden asegurar cortos tiempos de atención, ya que los equipos han cumplido su vida útil, presentando obsolesencia tecnológica, además que por el uso, además que por el uso continuo y con horarios extendidos presentan fallas y deterioro del equió y sus accesorios”, pone el estudio.
Las atenciones se posponen por esa razón hasta 11 meses, con el consiguiente riesgo que implica para los pacientes y una tasa de mortalidad de 330 personas con cáncer al día.
En el extremo, ni el Centro Médico Nacional Siglo XXI tienen en funcionamiento óptimo sus equipos. “Es uno de los hospitales referncia a nivel nacional para el tratamiento del cámber, por lo que que sus equipos se enecuentren inoperantes repercute directamente en la productividad, programación y atención de los pacientes, haciendo que estos tengan que esperar meses para una reprogramación”, detalló el IMSS.
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