DAR LA VUELTA / La Ruleta Mexicana
Los artículos de opinión son responsabilidad exclusiva de sus autores.

Imagen por IA.
“Si un día tiene unas ganas de mentar madres a todo pulmón hágalo a cubierto, en un espacio seguro y sin que nadie lo escuche o vea, de por sí ya todos jugamos sin querer a la ruleta mexicana”.
POR DIEGO A. LAGUNILLA
Desde pequeño supe por conocimiento transmitido y no sabiduría descubierta, que mentar la madre en nuestro país se transforma en una variante habitual, ostensible y recurrida de la “ruleta rusa”.
Resonancia de aquel juego “macabro”, supuestamente ideado en aquellas regiones del planeta, donde el frío gélido, en todos sus sentidos, tiraniza y que se compone por un revolver, una bala, colocada en el tambor, sin seguro por supuesto y para el caso, seis “valientes” que retan al destino para ver quién se convierte en “cobarde”, al caer por cuenta propia del hoyo en su sien.
Si en nuestro país le “recordamos” la progenitora a alguien, tocamos quizá la fibra más sensible de la mitad de la población nacional, porque no sólo le restregamos en la cara que no ha superado su estado edípico, sino que este ha derivado en un trastorno mucho más obscuro, donde su incapacidad de aceptar la condición, de negarla e incluso de repudiarla, lo lleva día con día, a matar una “media” de diez mujeres.
Esas mismas que no descansan, y no lo harán, porque nuestra sociedad las repudia, de lo contrario no tendríamos “representantes” que sin importar el género continúan tapando el “problema”, ya sea desde mirando hacia otro lado hasta encubriendo a violadores y asesinos confesos.
Por eso querido vecino, si un día tiene unas ganas de mentar madres a todo pulmón hágalo a cubierto, en un espacio seguro y sin que nadie lo escuche o vea, de por sí ya todos jugamos sin querer a la ruleta, mexicana. Esperemos sinceramente que esa “bala” nunca nos encuentre y de ser así no sea por nuestra propia mano, por lo menos que esta sirva para generar las condiciones de que esto cambie a favor.