Ciudad de México, abril 27, 2024 03:01
Opinión Rodrigo Cordera Thacker

AMLO… ¿Macho progre?

Los artículos de opinión son responsabilidad exclusiva de sus autores.

POR RODRIGO CORDERA THACKER

El presidente Andrés Manuel López Obrador acaba de anunciar que iniciará la venta de cachitos de lotería el día 9 de marzo, el día del paro nacional de mujeres.

¿Quién entiende este razonamiento? ¿A poco nadie en el gabinete le dijo que sería visto como un acto de provocación, insensible y francamente innecesario?

Algo queda claro: al presidente no le gustan los movimientos que no controla.

No se entiende cómo un presidente que logró aglutinar a las izquierdas mexicanas, desprecie a un movimiento que no lo ataca (hasta ahora) directamente, sino que pide soluciones prontas y cambios radicales.

Foto: Galo Cañas / Cuartoscuro

No se entiende que el gabinete más paritario de la historia se quede callado ante los errores y deslices del presidente más votado de la historia.

No se entiende que pudiendo abrazar a un movimiento tan importante quiera hacer enemigos por paranoia. Y esto es lo grave. Nadie tiene duda que la derecha se quiere montar en el movimiento feminista, pero basta un poco de lectura para entender que la derecha y el movimiento feminista son antagónicos y se generan repele. El aborto es su mayor diferendo, la iglesia ni se diga.

Por lo que las reacciones del presidente no se entienden más que desde una óptica de conservador o macho progre.  Un macho que es “sensible” ante el feminismo, pero no lo considera prioritario.

Un macho progre es aquel que aprueba o desaprueba lo que no le incumbe. Un macho progre es aquel hombre que busca el protagonismo en la lucha feminista, un hombre que cree que entiende mejor el maltrato, machismo, y discriminación que las que lo padecen. Un macho progre es como un hombre blanco hablando de la esclavitud, es aquel que habla POR los indígenas, es aquel que roba el reflector de causas justas, sin haber sido victimizado. Es un impostor, vamos.

Desde el feminicidio de Ingrid y la pequeña Fátima (el presidente nunca nombró a las víctimas) han asesinado 10 mujeres al día. La emergencia es real, el dolor es real y la exigencia a este gobierno que se dice de izquierda es más que legítima.

Este gobierno tiene muchos enemigos. No es mentira que existe una derecha reaccionaria que detesta el movimiento-partido de AMLO. Por lo que considero innecesario abrir otros frentes contra movimientos legítimos e importantes porque no se cuadran a él.

Pero también es cierto que al generar una masa votante tan “plural” se le colaron muchas personas que no comulgan con la izquierda. Y de eso hay recuentos a raudales.

En diciembre una diputada de morena presentó una iniciativa que buscaba acabar con el estado laico. Hace unos días, Salomón Jara, senador de Morena, presentó una iniciativa para acabar con el regueatton, y las narco series, cosa absurda para la libertad de expresión.  Algo raro está pasando con ese bordado extraño que es Morena. Además de que la crítica interna no es su fuerte.

Pues el presidente está asumiendo ese rol antagónico al movimiento feminista, y es muy grave que su gabinete haga mutis al respecto.

Compartir

comentarios

Artículos relacionadas