El antro Seven Sins: historia de impunidad que no termina; el delegado Jorge Romero es su 'fan'
El 15 de noviembre del 2009 Alfonso Belmont Martínez fue herido de muerte mientras festejaba con sus amigos, en el Billar/Bar Seven Sins de la colonia Letrán Valle, el tercer año de haber concluido sus estudios de Medicina en la Universidad Nacional. Luis Ubaldo Hernández, el presunto asesino de 27 años de edad, fue capturado el 18 de enero del 2010, justo siete días antes de que fuera atacado el futbolista Salvador Cabañas den el Bar-Bar de San Ángel. El Seven Sins –en cuya página de Facebook aparece como seguidor el actual jefe delegacional Jorge Romero Herrera (ver foto)– fue cerrado por la DBJ sólo durante 10 días, cuando ya fungía como director general Jurídico y de Gobierno Luis Vizcaíno, ratificado en el cargo el pasado 1 de octubre. Luego el antro fue cerrado otras dos veces durante el gobierno de Mario Palacios. Y otras dos veces reabierto. El pasado viernes 14 le impusieron sellos de “suspensión de actividades” por cuarta vez, y no se trata de una clausura definitiva.
El caso del asesinato de Belmont obra en el expediente de la averiguación previa FBJ/BJ/T2/02537/09-11, folio 350013 y el relato del asesinato fue publicado en algunos medios impresos. “Los testigos declararon ante el Ministerio Público que la reunión (de Belmont y sus amigos) comenzó a las 19:00 horas, del día 14 de noviembre, consignó el periódico El Universal. “Pero cerca de la medianoche, ocurrió una pelea entre varios de los asistentes, por lo que el personal de seguridad del lugar, sacó a los rijosos, entre los que se encontraba el probable responsable.
“Afirmaron que Luis Ubaldo, ya en la calle, fue a su motoneta, estacionada a un lado de la negociación, y sacó de la cajuela de este vehículo una pistola, tipo escuadra, calibre 45, la cual guardó entre sus ropas y volvió a ingresar armado a la negociación. Ya dentro del local, a los pocos minutos reinició la pelea con varios de los asistentes. Cuando Alfonso Belmont y otros de sus compañeros intentaron separar a los rijosos, Luis Ubaldo sacó su pistola y disparó al aire, para luego accionar de nuevo el arma e hirió a Alfonso en el tórax. De inmediato, el agresor salió del lugar y huyó, mientras que el lesionado, aún con vida, fue llevado por elementos de la Unidad de Protección Civil del Gobierno del Distrito Federal al Hospital General de Xoco, donde la víctima falleció cuando le eran practicados los primeros auxilios”.
Pero el historial irregular de ese sitio no comenzó aquel día, sino durante el gobierno de Germán de la Garza en la Delegación Benito Juárez. Justo dos años antes, el 26 de noviembre del 2007, el periódico Reforma dio a conocer que diez empleados del bar-billar (entonces llamado Seven Pool Bar) fueron consignados al Reclusorio Oriente tras un operativo que realizó la Procuraduría capitalina en el interior del bar, donde se halló a 30 menores de edad con aliento a alcohol. Gerardo Monroy, fiscal de la agencia 50 del Ministerio Público, informó que “las investigaciones arrojaron que los inculpados cobraban 30 pesos por dejar pasar a los menores al negocio, y a cambio les entregaban una copa de vino de cortesía, especialmente a los jóvenes cuyas edades oscilan entre los 15 y 17 años de edad”.
Como si las anomalías en el Seven Sins fueran una novedad, la DBJ anunció con bombo y platillo la suspensión del antro el pasado 14 de diciembre, tras una intensa presión de vecinos a través de redes sociales. Reforma publicó ese día: “El director general de Jurídico y Gobierno de la Delegación Benito Juárez, Luis Vizcaíno, detalló que el negocio no contaba con una ambulancia con paramédicos para atender a clientes, señalamientos de salidas de emergencia, además de que se permitía la entrada a menores de edad, a los que se les vendían bebidas alcohólicas”.
A los encargados del Seven Sins –ubicado en el número 1146 de Avenida Cuauhtémoc– no parece preocuparles que una vez más les hayan cerrado el changarro. “SUSPENSION DE ACTIVIDADES HASTA NUEVO AVISO, POR SU ATENCION Y COMPRENSION, GRACIAS (sic)”, ponen en su página de Facebook (https://www.facebook.com/sevensinspoolandbeer?fref=ts). Lo cierto es que, además de que ya conocen a Vizcaíno de tiempo atrás, el delegado Jorge Romero Herrrera aparece entre las 8,415 a las que les gusta la página del antro en Facebook.