Explota furia vecinal contra resguardo del Metrobús en Diagonal San Antonio; va ‘resistencia civil’ con bloqueo de calles
Anoche sonaron los clarines con los que más de 200 vecinos de la colonia Narvarte anunciaron el inicio de una ‘resistencia civil’ que, de concretarse, será insólita en la demarcación juarense. Los residentes, furiosos, exigieron la intervención de la delegación Benito Juárez para impedir que el Gobierno del Distrito Federal construya un resguardo de la nueva Línea 3 del Metrobús en Diagonal de San Antonio.
De acuerdo con el director general de Participación Ciudadana de la DBJ, Christian Von Roerich, el gobierno capitalino informó a las autoridades delegacionales que los vehículos no circularían por esa arteria secundaria, después de que “el jefe delegacional hizo saber al jefe de Gobierno que ello no era viable”. Aseguró que no obstante ello de manera repentina los trabajadores del GDF dieron inicio a la obra. Al calor de la gritería que le exigía parar la obra, el funcionario se comprometió a interceder por los vecinos en la mesa de diálogo con el gobierno capitalino, a fin de “lograr un acuerdo” para que ese paradero sea reubicado. La propuesta de Von Roerich a los vecinos para que sus reuniones subsiguientes las realizaran en lugares cerrados, a fin de “evitar infiltraciones”, no prosperó.
Reunidos en la esquina de San Antonio y Avenida Cuauhtémoc, justo frente a la futura terminal de la Línea 3 del Metrobús en la Plaza de la Transparencia, los vecinos acordaron “ir hasta las últimas consecuencias” para impedir que los autobuses crucen por la colonia y sean estacionados en la Diagonal. Más aún, advirtieron que no permitirán que ese paradero sea ubicado en algún punto de la demarcación juarense.
Federico Manzo, diputado del distrito 17 al que corresponde Narvarte, explicó que la intención del Gobierno del DF es instalar una base para que se estacionen camiones del sistema en reserva, que serían usados en horas ‘pico’. El panista propuso como opción que el resguardo sea implementado en la colonia Doctores, que ya forma parte de la delegación Cuauhtémoc.
Alentado por los vecinos, Manzo encabezó una marcha –inusual forma de protesta en la delegación Benito Juárez— que recorrió cuatro cuadras de ida y vuelta por Diagonal San Antonio, en lo que fue una suerte de ejercicio de preparación para una “resistencia civil” –según la llamaron— que iniciaría este día. El diputado se comprometió a presentar un punto de acuerdo en la Asamblea Legislativa, a fin de que se lleve a cabo una consulta pública que debió realizarse previamente a la obra y que se exhorte al jefe de Gobierno a cancelar la construcción del resguardo.
Los residentes –que contaron con el apoyo de líderes vecinales de otras colonias, entre ellos quienes se han opuesto a la construcción de pozos hidráulicos y han denunciado construcciones irregulares— comenzaron por su parte a organizarse en grupos para relevarse en un plantón que será la base de su protesta. Entre los acuerdos que establecieron en la “asamblea” de ayer por la noche está la de realizar acciones contundentes “pero siempre pacíficas”, como el bloqueo de Avenida Cuauhtémoc. Mientras tanto, con el apoyo de la oficina del diputado Manzo, otros vecinos darán seguimiento al trámite de un amparo contra la obra. Una nutrida parte de esos vecinos está en desacuerdo con esa vía, en medio de su enojo porque, aseguran, el GDF les ocultó su “verdadera intención”, que era –dicen– la de imponer el paradero por sorpresa. “Vamos a tomar las calles, no les demos más tiempo”, claman. Son diferencias de forma. Porque hay un grito que une a los integrantes del movimiento emergente: “¡Paradero, igual a basurero!”.