¡Recórcholis! / Yo en la cuarentena
Mi último cumpleaños fue muy, muy, pero muy raro, porque fue en línea, las únicas personas a las que vi fue a mi familia y a mi mejor amigo, todo por computadora. Aunque mi pastel estuvo muy rico.
ROCCO SAGOLS GARCÉS
Un gran cambio para mí fue cuando empecé a tomar clases en línea. No me gusta nada, pero tuve que aceptarlo. La verdad es que ha sido muy aburrido tomar las clases, son tediosas, no me gusta este nuevo modo. Lo que sí me gusta más es que el recreo dura más, aunque el recreo de antes era divertido. Tener una compu en las clases, me pone más distraído, porque me dan ganas de meterme a otras páginas y sí lo he hecho, aunque muy poco. Sé que no está bien, pero a veces casi me quedó dormido si no hago algo.
Es muy raro no poder salir, aunque sí salgo un poco a pasear a mi perro o a casa de mi papá, veo que en otros países sí prohibieron salir en algún momento y aquí no se puede.
Mi último cumpleaños fue muy, muy, pero muy raro, porque fue en línea, las únicas personas a las que vi fue a mi familia y a mi mejor amigo, todo por computadora, mi pastel estuvo muy rico, pero eso no es todo. No me fascinó pero no estuvo tan mal. Lo raro es que en Halloween no hice nada, fue como si no pasara nada.
Ya va a llegar Navidad, pero la verdad no me emociona tanto como otras veces. Es la triste realidad, estamos confiscados en mi casa, la verdad no creo que me den muchos regalos, la economía está mal ni siquiera quiero tantos, pero sí me decepciona un poco. Siento que navidad no será muy especial como antes. Probablemente no tendré clases, quizá estaremos en mi casa.
A veces siento que esto será como “la peste negra”, que no lo entiendo muy bien, pero sí creo que esto lo vamos a superar en años. En algún momento seguro habrá una cura, pero no sabemos cuándo. Qué bueno que tocó estar en México, porque hay gente que viajó y se quedó atorada en otro país; imagínense esa situación, quizá se quedaron sin dinero, sin comida. Creo que soy bastante suertudo.
Ya me estoy empezando a aburrir. En las noches me he llegado a poner insoportable, porque no me quiero dormir y lo tengo que hacer y ni modo.
Antes de la cuarentena yo ya tenía un jobi, y ahora lo hago con más tiempo y más gusto. Hago esculturas y no es por presumir pero la mayoría me quedan bastante bien, siento que si una escultura no me queda bien, me enojo y me pongo algo loco.
Es mi pasión hacer las esculturas, me gusta muchísimo, a veces es muy tedioso. Hoy planeaba hacer tres y solo hice una y eso fue por flojera. A veces sí me da mucha flojera. Descubrí que no me gustaban tanto las caricaturas y ahora me gustan mucho y veo muchas de la época de mi mamá, son muy padres.
Yo ya quiero que esto se acabe de una vez por todas. Es de las etapas que más odio, pero me refugio en mis esculturas y pobre de mi perrita, a veces yo creo que no me aguanta. Bueno, chau.