Revive movimiento contra deprimido de Mixcoac por tala de árboles en Barranca del Muerto; gobierno responde que derribos ya estaban considerados
(Mariana Malagón)- De las 16 modificaciones que se realizaron al proyecto del desnivel Mixcoac-Insurgentes anunciadas en agosto de 2015, la construcción de la rampa de salida en Barranca del Muerto se realizará de manera subterránea, es decir, ya no sobre el camellón central como planteaba el proyecto original.
De las adecuaciones presentadas por la Secretaría de Obras y Servicios (Sobse), nueve son para el peatón, seis ambientales y una en materia de movilidad vial. “La rampa correrá debajo de los carriles de la vialidad poniente”; además, la rampa será cubierta con “tabletas” para que se acondicione como área jardinada.
Sin embargo, vecinos inconformes de colonias como Acacias, Del Valle, Florida, Actipan, San José Insurgentes e Insurgentes Mixcoac protestan ante la posibilidad de la tala de 213 árboles ubicados sobre el camellón de dicha vialidad, desde Río Mixcoac hasta avenida Insurgentes. Argumentan que la obra ya ha cobrado más de 600 ejemplares arbóreos.
Al respecto, Sobse aseguró que hasta la fecha se han derribado únicamente 400 árboles. Y que en el frente de Barranca del Muerto “se estima el retiro de 90 elementos”, los cuales están contemplados en los 600 árboles autorizados por la Secretaría de Medio Ambiente (Sedema).
De acuerdo con esa dependencia, el nuevo proyecto del desnivel Mixcoac-Insurgentes resultó de 80 mesas de trabajo y 35 recorridos que se realizaron en la zona, tanto con integrantes de Comités Ciudadanos como con vecinos opositores, así como especialistas. En contraste, el grupo de vecinos opositores ha denunciado que esas reuniones “fueron simuladas” y que sólo se llevó a cabo una.
Asimismo, señala que actualmente no existe comunicación “clara ni directa con los vecinos” por parte de Oswaldo Tungüí, Tania Müller y Patricia Mercado, secretarios de Obras, de Medio Ambiente y de Gobierno de la CDMX, respectivamente.
El pasado 8 de marzo se cumplió un año del “madruguete” que el gobierno capitalino dio a vecinos con la tala de 200 árboles, lo que desató un intenso movimiento que obligó a la modificación del proyecto original del deprimido.
Ahora el derribo de árboles en Barranca del Muerto reaviva al movimiento . El frente Vivan los Árboles y la Asociación Ciudadana del DF AC realizaron este miércoles una protesta-performance.
A nombre de los convocantes, Leonora Esquivel dijo que a pesar de las manifestaciones vecinales y la Denuncia Popular ante la PROFEPA con base en la Ley General de Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente, así como la denuncia por violaciones a los derechos ciudadanos de la participación y la información, cometidos por la Secretaría del Medio Ambiente del Gobierno del Distrito Federal (omisión en publicar la Manifestación de Impacto Ambiental presentada por la Secretaria de Obras y Servicios, encargada del proyecto, así como la omisión de la autoridad para convocar una consulta pública para el derribo masivo de árboles), “a la fecha se continúa improvisando respecto al trazo de la obra y al destino mismo de los árboles”.
“Ahora se sospecha que la obra se extienda por Barranca del Muerto hasta Insurgentes, con el consecuente derribo de 300 árboles más”, acusó la activista ambiental.
Abundó que “en días pasados con los vientos atípicos, consecuencia de la tala inmoderada de los últimos 50 años, en la ciudad han caído 400 árboles y no podemos perder más. Será imposible restituir los servicios ambientales que miles de ciudadanos recibimos de estos árboles, como ser la generación de oxígeno, la captación de miles de toneladas de contaminantes, la regulación térmica e hídrica, la absorción de ruido, el embellecimiento del paisaje urbano, y la sensación de bienestar lo cual influye en la salud física y mental de todos los ciudadanos”.
(En la foto, protesta-performance contra la tala en Barranca del Muerto, realizada este miércoles)