Van 900 vecinos de BJ por amparo en favor del Laureano
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Vista aérea de los árboles.
Además, otro millar respalda solicitud de no tocar una sola rama y afectar la raíz del laurel de la India, a través de Change.org y firmas físicas.
STAFF / LIBRE EN EL SUR
Fueron llegando uno a uno. O en familias. En parejas. Muchos con sus hijos. Durante ocho horas —bajo el sol de junio, pero apaciguado por la vital sombra del árbol Laureano— no dejó de fluir la gente que se acercaba a la mesa instalada justo frente al imponente laurel de la India que resguarda la esquina de Fresas y Miguel Laurent, en la colonia Tlacoquemécatl del Valle. Ahí, a los pies de Laureano, vecinos de Benito Juárez firmaron el amparo colectivo que exige que no se toque “ni una sola rama ni una sola raíz” de este árbol centenario.
Acudieron desde distintas colonias de la alcaldía Benito Juárez: lo mismo de Álamos que de Portales, de Narvarte, Acacias, y las distintas zonas de la propia Del Valle. Pero también llegaron vecinos desde Mixcoac, Nápoles y San José Insurgentes, convocados por la urgente necesidad de frenar el avance del desarrollismo inmobiliario. El punto de encuentro fue la esquina de Fresas y Miguel Laurent, dentro de Tlacoquemécatl del Valle, que además de ser una colonia residencial también es reconocido como pueblo originario de San Lorenzo Xochimanca.
El árbol, al que ahora adornan listones de colores, parecía observar a cada firmante con su sombra protectora. En las cartulinas clavadas a los muros, en rejas y postes, se leía una misma consigna: “El árbol estaba aquí mucho antes que los planos del proyecto”. Otras decían: “No a la tala disfrazada”, “Laureano no se toca”, “Vivos nos queremos, verdes también”.
Más de 900 vecinos interpusieron con su firma una solicitud de amparo que será presentada ante un juzgado federal. La meta es clara: impedir cualquier intervención sobre el árbol. Además de quienes firmaron presencialmente, otro millar de personas ha respaldado la exigencia mediante Change.org y formatos físicos en diversos puntos de la ciudad. Y otro millar adicional ha suscrito nuevas rondas de adhesión, lo que eleva a más de dos mil personas activamente movilizadas en defensa del árbol.
En la tarde de este martes, representantes del masivo movimiento acudirán a las oficinas de la Secretaría del Medio Ambiente de la Ciudad de México (Sedema), donde exigirán ante el propio desarrollador la cancelación total del proyecto inmobiliario en el predio, por representar una amenaza directa al ejemplar arbóreo y su ecosistema.
Con una edad que supera el siglo de vida, Laureano se ha convertido en el mayor símbolo de la defensa ambiental en la Ciudad de México. Su presencia frondosa, su historia viva y su resistencia frente al avance de las inmobiliarias lo han elevado al rango de emblema urbano. No es sólo un árbol: es el corazón de una lucha por el derecho al espacio verde, a la sombra compartida, al oxígeno y a la memoria barrial.
