Venden ‘veneno embotellado’ dentro de una clínica del IMSS; también donas, pasteles, galletas…
Delirio de azúcar en una clínica del IMSS. Fotos: Libre en el Sur
STAFF / LIBRE EN EL SUR
En un expendio instalado en el interior de la clínica 28 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) se expende a los derechohabientes galletas, pasteles, donas y refrescos de cola a los que el subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, ha llamado “veneno embotellado”.
El negocio, que funciona por concesión a un particular en plena pandemia de coronavirus, anuncia en el refrigerador la marca Coca-Cola con la imagen de una gran botella, a pesar de que ese producto ya lleva impreso el etiquetado frontal que advierte del exceso de calorías y azúcares añadidos y que en una campaña publicitaria de PrevenIMSS en medios electrónicos se invita a la población a “alejarse de la comida chatarra y los refrescos”.
La tienda se encuentra al inicio del pasillo de la planta baja por el que se accede a los consultorios de atención externa, a donde habitualmente acuden personas adultas mayores, que son la población más expuesta a Covid-19, máxime si, como afirman las autoridades sanitarias, presentan sobrepeso u obesidad, diabetes e hipertensión, enfermedades asociadas, entre otros factores, a la mala alimentación.
Ahí se ofrecen, además de los refrescos de la línea Coca-Cola, jugos industrializados y alimentos a base de harina refinada y azúcar, donas y pasteles, galletas, flanes y otras golosinas.
Justo a las afueras de la clínica, ubicada en la esquina de Gabriel Mancera y San Borja, en la colonia Del Valle, se ha colocado un “kiosco” de atención médica para la realización de pruebas rápidas de glucosa y toma de presión arterial. Ahí mismo se distribuye un folleto con recomendaciones para una dieta “baja en azúcar”.