Ciudad de México, abril 25, 2024 02:54

Los artículos de opinión son responsabilidad exclusiva de sus autores.

POR MARCO ANTONIO ROMERO SARABIA

En los días pasados, el Gobierno de la Ciudad de México, a través de la Agencia Digital de Innovación Pública dio uno de los anuncios más sorprendentes y a la vez escandalosos relativos a la anterior administración de la capital. A través de un portal de internet, se hizo pública información que exhibe cómo el gobierno encabezado por el hoy Senador Miguel Ángel Mancera maquilló cifras relacionadas a la violencia en la Ciudad de México.

Solamente por poner un ejemplo, a través del “maquillaje” se ocultaron, solamente en 2018, 145 homicidios, más de 15 mil robos a transeúnte, 715 violaciones y 245 secuestros.

Así como suena: con tal de mantener bajos los índices delictivos, el gobierno de Mancera insultó a la inteligencia de la ciudadanía y mintió con descaro ocultando, en total, más de 24 mil ilícitos. Abominación criminal que, por cierto, ha retomado la Procuraduría General de Justicia que ya investiga a más de cien funcionarios de dicho gobierno.

El entonces gobierno de la delegación Benito Juárez no fue la excepción y también resultó beneficiado por estas triquiñuelas mafiosas: en total se ocultaron 3 homicidios, 643 robos de automóvil, 26 secuestros, 11 violaciones, 1237 robos a transeúnte y 162 robos a negocio.

¿Debe pronunciarse el alcalde Santiago Taboada? Por supuesto.

¿Debe dar una aclaración Christian Von Roehrich? Sin ninguna duda.

Esto, sin embargo, parece ocioso si recordamos que Miguel Ángel Mancera, tras dejar el cargo de jefe de Gobierno y entregar resultados escandalosamente lamentables, llegó al Senado de la República gracias a una candidatura regalada por Acción Nacional. Hoy este partido cuenta con un Senador que, aunque se diga independiente, llegó a su encargo actual con la complicidad y la venia de la dirigencia panista.

¿Se deslindarán de haberle propuesto al pueblo a un candidato que engañó y falseó información? Sería muy grave que continúen siendo cómplices.

 

Compartir

comentarios

Artículos relacionadas