Cumple 10 días plantón de vecinos en Millet 39; exigen clausura definitiva y demolición
Vecinos de la colonia Extremadura Insurgentes cumplieron 10 días en plantón permanente frente al edificio irregular de Millet 39, que ostenta en su fachada los sellos de “suspensión de actividades” colocados por la Secretaría de Protección Civil del GDF y la Delegación Benito Juárez, y exigen al delegado Mario Alberto Palacios la clausura definitiva del inmueble y su demolición.
El plantón tiene como objetivo inmediato el vigilar permanentemente que los constructores de la obra impugnada, la empresa inmobiliaria Rouz, no intente de nuevo la ocupación del edificio como ocurrió el pasado 21 de abril, cuando los vecinos impidieron que fueran descargados muebles transportados en un camión de mudanzas.
Ese mismo día, los residentes realizaron como protesta cortes a la circulación en la calle Millet, primero, y de manera parcial en la avenida Insurgentes Sur, hasta que fueron reprimidos por el cuerpo de granaderos de la policía capitalina. Finalmente la secretaría de Protección Civil decidió colocar sellos de “suspensión de actividades” en el inmueble, de manera precautoria, al mismo tiempo que los vecinos iniciaban su resistencia con un plantón permanente cobijados por una carpa aportada por un residente.
La obra en cuestión –que permaneció más de dos años clausurada por la DBJ— ha sido impugnada por la Secretaría de Desarrollo y Vivienda (Seduvi), la Secretaría del Medio Ambiente (SMA) y la Procuraduría ambiental del DF (PAOT), que en diciembre de 2010 pidió su demolición. La PAOT estableció que “con solicitudes de constancia de uso de suelo apócrifas se hicieron valer derechos adquiridos para registrar manifestación de construcción para 70 viviendas en cinco niveles (8,994.96 m²) y para solicitar la terminación de obra, cuando la Seduvi expidió el certificado de uso de suelo folio MORO1640007, con tres niveles de construcción permitidos en una superficie máxima 4,767.07m²”.
Por su parte, la Seduvi entabló un juicio de lesividad ante el Tribunal de lo Contencioso Administrativo del DF, para revocar el permiso de construcción obtenido con documentos falsos y en enero pasado obtuvo una resolución favorable a su demanda, por lo que el edificio debería ser demolido. Sin embargo, por una supuesta “falla” en el procedimiento, el Tribunal ordenó a la Delegación Benito Juárez el retiro de los sellos de clausura, lo que ocurrió el pasado 9 de abril y permitió a la inmobiliaria Rouz ocupar el inmueble y llevar a cabo con una veintena de operarios, de manera apresurada, trabajos de resane y pintura en las áreas comunes.
Una solicitud de la Comisión de Derechos Humanos del DF a la Delegación Benito Juárez para que realizara la clausura “precautoria” del edificio no fue atendida. Finalmente, el pasado 24 de abril, verificadores del Instituto de Verificaciòn Administrativa colocaron “por órdenes de la DBJ” sellos de “suspensión de actividades”. Sin embargo, el problema sigue sin solucionarse y los vecinos exigen la clausura definitiva y la demolición del inmueble, demanda que va ya para tres años, pues desde septiembre de 2009 se le planteó al entonces jefe delegacional Germán de la Garza.