Ciudad de México, noviembre 22, 2024 09:03
Sin categoría

¿En qué México estamos?

Por María Luisa Rubio González

Dos mujeres en un auto; tarde típica de tráfico en la ciudad de México. Varias vueltas por los alrededores de la Embajada Rusa sin encontrar lugar de estacionamiento. De pronto, alegría, un metro adelante va saliendo un coche. Sonrisas de júbilo, intermitentes, maniobra para estacionar… a un lugar sorpresivamente ocupado por un guardia de seguridad privada que llega corriendo con un gran cono naranja.

Diálogo típico por la ventanilla:

-Por favor quite su cono, nos vamos a estacionar.

-No se puede, está apartado.

-No puede apartar el lugar, esto es la vía pública.

-Está apartado para el cliente que se va a dar la vuel…

-No puede apartar el lugar, esto es la vía pública. Quite su cono, por favor.

-No lo voy a quitar

-Quítelo por favor.

-No lo voy a quitar

-Pues entonces llamamos una patrulla.

-Pues llámela.

Coche apagado, puertas abiertas. Una mujer al teléfono explica la situación en el 066; la otra repite casi textual el diálogo anterior con el supervisor del guardia de seguridad que llega a ver qué está pasando.

Cuando escucha que ya se está dando la ubicación del desaguisado a la patrulla, reflexiona un poco y dice, con mucha calma:

-Ah, sí. Dice usted el artículo 25 fracciones (cito dos, lo juro) de la ley de cultura cívica, pero qué cree… estamos en México, y aquí las leyes… ya sabe.

Lo cuento y me vuelvo a enojar, pero también me vuelvo a enfrentar al doloroso entendimiento de eso que llamamos “cultural”. ¿Cómo le explico que “México” no es un lugar, no es un monolito?. Me vi enarbolando mi escapulario cívico de la buena ciudadanía y agarrando aire para largarle un buen sermón sobre ¿sobre qué, por dios?. La verdad es de pronto toda la situación me dio mucha hueva.

Solo atine a decirle: “Ese es el México en el que usted decide vivir. Yo decido vivir en un México donde sí se cumplen las leyes. Quite su cono, por favor”.

Entre dientes dijo algo como: cuando llegue la patrulla, y se fue.

Nos dispusimos a esperar a la patrulla. Medio minuto después, el guardia quitó el cono sin decir palabra.

La patrulla no llegó. Llegamos tarde a nuestra cita. Pero estacionamos. Y a la salida encontramos el coche intacto.

“¿Pero qué cree?, estamos en México”. Se puede usar como #Hashtag, como ecuación que iterada, escalada, desarrollada (ayuda, matemático social) define nuestra sociedad. La frase me sigue retumbando. Pero, en efecto, “México” no es un monolito, “México” lo hacemos todos, todos los días. Lugar común de pronto tan tangible.

Por lo pronto, hagamos una ciudad más ciudadana (comercial): Ojo a los procesos de consulta para el presupuesto participativo 2017, y de renovación de comités ciudadanos. Esta semana concluye el plazo del registro de proyectos y de inscripción de fórmulas.

Compartir

comentarios

Artículos relacionadas