Ciudad de México, noviembre 23, 2024 07:28
Argel González Opinión

ASTROLABIO / Un busto para el fotógrafo Héctor García, ‘El pata de perro’

Los artículos de opinión son responsabilidad exclusiva de sus autores.

POR ARGEL GONZÁLEZ

El pasado jueves 23 de agosto, el fotógrafo mexicano Héctor García, uno de los más grandes maestros de la lente y quien murió en 2008, habría cumplido 95 años. En 2006 festejó su cumpleaños número 83 en el Centro Cultural Cine Venustiano Carranza, espacio cultural abandonado durante varios años que logró recuperar, gracias al Programa de Apoyo a la Infraestructura Cultural de los Estados (PAICE), la administración encabezada por Ruth Zavaleta, entonces militante del PRD y jefa delegacional en Venustiano Carranza.

Ese día, se inauguró la galería que llevaba el nombre de El pata de perro —como cariñosamente le llamaban sus amigos al maestro— y que desde 2012 no existe gracias a la decisión de las autoridades delegacionales encabezadas por Julio César Moreno. El espacio había sido concebido como el más importante en la zona para dar cabida al trabajo de los fotógrafos.

Durante el festejo aquel miércoles 23 de agosto de 2006, se dio banderazo de inicio a la colecta de llaves, con las cuales se elaboraría un busto para ser colocado en el Parque de los Periodistas Ilustres, ubicado en Fray Servando Teresa de Mier y Congreso de la Unión, sin embargo, la iniciativa fue frenada, luego del arribo de Julio César Moreno a la jefatura delegacional, el 1 de septiembre de 2006.

Héctor García. Foto: Pedro Valtierra / Cuartoscuro

 

El maestro Héctor García nació en 1923 en el populoso barrio de la Candelaria de los Patos y era miembro honorario del Consejo de Cultura Delegacional. Entonces, la licenciada Esthela Damián Peralta —quien recientemente ha sido nombrada por Claudia Sheinbaum como Directora del DIF en la Ciudad de México­— fungía como Directora de Desarrollo Social de la delegación Venustiano Carranza y había dado todo su apoyo y colaboración para que el reconocido fotógrafo fuera homenajeado.

En un intento por darle continuidad a la iniciativa de colocar el busto del maestro Héctor García y de conservar la galería que llevaba su nombre, el equipo saliente y lo impulsores de la iniciativa se reunieron con Sergio Vicario García, Director de Cultura de la demarcación, quien se comprometió a seguir con los trabajos en pro de Héctor García, pero pasados dos años y después de varias reuniones, nos dio una respuesta del jefe delegacional Julio César Moreno que nos dejó sin palabras: “Les manda a decir el jefe —dijo Vicario García—, que quién es ese viejito y que qué méritos tiene como para ponerle una busto. Que si María García y sus hijos no reclaman, ustedes deben de para ya este asunto”.

El funcionario disculpó su jefe diciendo que era político y que tenía una cultura muy limitada, por lo que ya no podía hacer nada si el delegado no le daba luz verde. Además, nos informó que el escultor Pedro Ponzanelli realizaría los bustos de Lolita Ayala y Jacobo Zabludowsky, a quienes el jefe delegacional consideraba dos grandes periodistas, pero que definitivamente  Héctor García, fotógrafo internacional que publicó sus imágenes en revistas como Life, no estaría jamás en dicho parque. Además, Julio César Moreno, ordenó el desmantelamiento de la galería Héctor García, cuya placa de inauguración fue arrumbada en una bodega. De lo anterior informé en su momento al periodista cultural Carlos Martínez Rentería, quien en su columna Salón Palacio que publica en La Jornada denunció lo ocurrido.

Dentro de pocos días Julio César Moreno, cacique perredista de Venustiano Carranza volverá al cargo que heredó durante varias administraciones a sus compadres Alejandro Piña, Manuel Ballesteros y a su hermano Israel Moreno Rivera. Esta vez regresa bajo el cargo no de  “jefe delegacional” sino de “alcalde” y es muy seguro que bajo su administración la galería que llevaba el nombre de tan importante fotógrafo no sea restituida y que tampoco se coloque el busto.

Sin embargo, la llegada de José Alfonso Suárez del Real, un hombre sabio, sensible y con amplio bagaje cultural a la Secretaría de Cultura de la CDMX, nos llena de esperanza y confiamos en él para que durante su administración el daño e incumplimiento de tres administraciones encabezadas por el equipo del ignorante Julio César Moreno en Venustiano Carranza, sea reparado por el nuevo gobierno, por lo que esperamos que en esa demarcación donde nació o en Benito Juárez, donde vivió por varias décadas, se coloque tarde pero seguro, el busto que le ha sido negado a un hombre que puso en alto el nombre de nuestro país en todas las latitudes del mundo que visitó a lo largo de su vida.

Para quien esté interesado en conocer la obra del maestro pueden visitar la Fundación María y Héctor García, en Cumbres de Maltrata número 581, Colonia Segunda del Periodista, Delegación Benito Juárez.

 

 

Casi lista la reapertura del Memorial del 68

Este año en que se conmemora el medio siglo del movimiento estudiantil de 1968 uno de los momentos más esperados es la reapertura del Memorial del 68. Sabemos que en su equipo trabajan de manera comprometida muchos jóvenes, a quienes de manera simbólica se les ha pasado la estafeta para realizar la profunda reflexión que implican estos cincuenta años de distancia con los hechos: Además de la brutal matanza que tuvo lugar el 2 de octubre de ese año emblemático, hace falta reconocer y destacar el valor de cuanto logró el movimiento, de los temas que puso en la agenda nacional, de las inercias que rompió, de las mentiras repetidas mil veces como verdades que cuestionaron y evidenciaron como falacias que servían al sistema político mexicano para mantener subyugado a un pueblo. ¿Qué cambió en 1968? Hay quienes de manera absurda dicen que nada. Yo digo que todo. Que este país nunca más sería el mismo si ellos no hubieran levantado sus voces. Por eso esperamos en octubre la reinauguración del Memorial, que promete un cambio en su discurso museográfico, a partir de las nuevas miradas historiográficas sobre el 68.

 

Compartir

comentarios

Artículos relacionadas