Es la Alcaldía BJ el lugar con más jefas de familia en todo el país
STAFF / LIBRE EN EL SUR
Quizá no debiera sorprendernos que sea Benito Juárez el municipio o su equivalente con más mujeres jefas de familia en el país. En nuestra demarcación, en efecto, cuatro de cada diez hogares son sostenidos por ellas, un alto porcentaje de las cueles son madres solteras. Son muchos los factores que inciden en esta realidad demográfica y social, pero fundamentalmente un alto nivel de escolaridad propio de nuestra población y una clara tendencia a la autosuficiencia femenina, muy liberal, lo cual le da un rasgo de dignidad muy importante.
Ciudad de México encabeza la lista de las entidades de la República con más alto porcentaje de jefas de familia, con un promedio del 31 por ciento según las más recientes estadísticas del INEGI sobre ese rubro (2017). Y, dentro de la capital, es Benito Juárez la que lidera en ese tema entre las 16 alcaldías, con un 39.8 por ciento. Superó ya a Cuauhtémoc, que ahora se ubica un poco más abajo, con un 39.3 por ciento. El tercer lugar en el podio lo ocupa Venustiano Carranza, con 35 por ciento. En contraparte, las alcaldías con menos nivel de hogares comandadas y mantenidas por mujeres lo ocupan Milpa Alta, con 22 por ciento, Cuajimalpa (23) y Tláhuac (26).
Hay un dato curioso: solamente una de las mil 804 colonias que componen la CDMX tiene mayoría de mujeres como jefas de familia, por encima de los varones. Se trata de la colonia Chimilli, en la alcaldía de Tlalpan, que llega a un sorprendente 55 por ciento, contra el 45 por ciento jefaturado por hombres. Tras ella van la colonia Tierra y Libertad, en Tláhuac, con 49 por ciento y la Independencia Batan Sur, en Magdalena Contreras, con 48. En contraste, las que acusan menor porcentaje de hegemonía femenina son la colonia Colegio Militar San Pedro, con apenas cuatro por ciento y la Unidad Habitacional ISSSFAM número 7, con un ocho, ambas en la delegación Tlalpan.
Otro dato indica que hay una coincidencia clara entre el número de hogares encabezados por mujeres y el porcentaje de la población femenina que tiene una actividad laboral. Así, la Roma Norte, en Cuauhtémoc, y nuestra colonia Del Valle, en BJ, tienen respectivamente el 38 y el 40 por ciento de hogares con jefas de familia y con 60 y 56 por ciento de las mujeres ocupadas. Un alto porcentaje de esas féminas trabajadoras lo hace en oficinas de corporativos ubicados en esas comunidades, en boutiques, salones de belleza, escuelas y otros negocios, y en los centros comerciales que ahí existen. Otras más son profesionales de diversas disciplinas y un buen número se dedica a la investigación o la docencia en universidades e instituciones especializadas.
Lorena Aguilar, especialista en este tema y autora de un interesante ensayo sobre el mismo (Mujeres jefas de hogar y algunas características de los hogares que dirigen), toca otros aspectos que sin duda inciden en el incremento de la proporción femenina al frente de hogares en nuestro país. Esos factores son el divorcio, la separación y la viudez. “Es una constante que la jefatura masculina está ligada específicamente al proceso de formación de uniones conyugales, mientras que la jefatura femenina tiene relación con la disolución de éstas, ya sea por separación, divorcio o viudez (Echarri, 1995), llevando a la mujer a un escenario inevitable: asumir la responsabilidad de organizar su entorno familiar”, explica.
Abunda Aguilar que la viudez ha sido el estado conyugal que ha predominado entre las jefas de hogar, debido a una mayor sobrevivencia en edades avanzadas de las mujeres, así como a una menor incidencia de uniones posteriores entre las viudas, pero esto “no es una tendencia creciente a lo largo del tiempo, observándose un descenso entre 2010 y 2015, al pasar de 31.6 a 27.6 por ciento de jefas de hogar bajo esta condición, respectivamente”. También, dice, se evidencia la separación como forma preferente de la disolución conyugal, más que el divorcio.
Las mujeres juarenses pueden estar realmente orgullosas no sólo por encabezar la lista de las jefas de familia en el país, sino por lo que significa de su capacidad y voluntad de asumir sus responsabilidades y su libertad, a la vez que tener el coraje y la dedicación para sacar adelante a sus hijos y ser, ante todo, ellas mismas. Felicidades a todas en este mayo, el Mes de las Jefas.