Mamás en pandemia / Construir el futuro
Los lideres son como malabaristas, girando platos sobre la punta de un palo de madera; después sacando otro palo y haciendo girar otro plato sobre él.
POR JULIETA GÓMEZ
Ser madre de adolescentes, empresaria, esposa, ha sido un gran desafío.
Recuerdo que una compañera hizo la analogía de que los lideres son como malabaristas, girando platos sobre la punta de un palo de madera; después sacando otro palo y haciendo girar otro plato sobre él; así, otro palo y otro plato, mientras giran y vigilan que no se caigan, van acomodando más y más. Mientras comentaba esto, yo pensaba “está hablando de mi vida, yo soy esa malabarista de tiempo completo”. Cada plato representa a mis hijos, mi trabajo, mi casa, mi pareja…
Paso la mayor parte del tiempo trabajando y cuando me qué es lo más importante en tu vida, lo sé sin dudar: Mi familia. Mis dos hijos de 17 y 14 años han sido la mejor experiencia de vida que he tenido, me han llenado de alegría viéndolos crecer, han sido el mejor apoyo e inspiración que he tenido, juntos nos hemos dado cuenta que la vida a veces puede ser difícil y a la vez llena de oportunidades.
Al papá de mis hijos lo perdimos cuando murió de cáncer. Y a pesar de que la vida era dura en muchos aspectos, mi misión se convirtió en hacerlos conscientes de que el pasado no dicta automáticamente nuestro presente ni nuestro futuro. Que uno es capaz de cambiar lo que nos impide ser como deseamos o lo que nos hace sentir insatisfechos o infelices.
Ahora viviendo esta etapa de pandemia con adolescentes, cualquiera podría pensar que ha sido una etapa complicada. Los cambios en la rutina y en el encierro te obligan a adaptarte a formas diferentes de emplear tu tiempo. Las escuelas cerradas, eventos cancelados, el negocio cerrado… Sé que mis hijos se están perdiendo momentos importantes, extrañan a sus amigos, ir al cine, practicar su deporte favorito.
Todos los días mi mensaje es que no están solos, que es momento de liberar la mejor versión de cada uno de nosotros. Hoy a pesar de esta nueva realidad, pueden elegir experimentar la satisfacción de sentirse vivos, dueños de su cuerpo, su mente y espíritu. Todos los días intento invitar a mis hijos y a mi misma a ver esto como un regalo de tiempo de encierro a construir el futuro, a construir las personas que queremos ser.
Ellos y yo aprendimos a utilizar este tiempo como un proceso para nosotros mismos, reencontrar lo que es realmente importante. Si algo está consiguiendo la pandemia es ayudar a replantearnos muchas cosas, tanto a nivel personal como profesional. A no olvidar nuestras prioridades.
—
Diseñadora industrial.