Enseñan en DBJ a aprovechar los residuos sólidos y no contaminar; suman 12.5 mil toneladas en el DF
Con motivo de celebrarse el próximo 5 de junio el Día Mundial del Medio Ambiente, la Unidad de Programas Ambientales de la Delegación Benito Juárez celebra conferencias de educación ecológica y cuidado del medio ambiente entre alumnos de quinto y sexto grado de primaria de escuelas de la demarcación.
Un primer evento se llevó a cabo en el Salón Vertical de la delegación política, con la asistencia y participación del ponente, biólogo Juan Gabriel Castro Torres, perteneciente del Centro de Educación Ambiental de la Secretaría del Medio Ambiente capitalina y los alumnos de las escuelas primarias: José Joaquín Terrazas, Federico Álvarez, DIF capitalino y Ponciano Rodríguez. El tema abordado por el especialista Castro Torres fue el de Manejo de Residuos Sólidos en el Distrito Federal, el que se destacó la inexistencia de basura o desperdicios, toda vez que, los desechos domésticos, comerciales, agrícolas, ganaderos o industriales, una vez clasificados, pueden ser reaprovechada prácticamente en su totalidad.
La cultura del reciclaje y protección al medio ambiente, explicó el especialista egresado de la Universidad Autónoma Metropolitana, puede llegar a contribuir sustancialmente en la recolección de los residuos sólidos, mal llamada basura, su confinamiento y disposición, así como sus consecuentes efectos de contaminación del suelo y salud de los habitantes de esta capital.
En este contexto el biólogo comenzó por señalar la recolección de residíos sólidos de esta capital se cuantifica en 12 mil 500 toneladas al día, a razón de 1.4 kilos por habitante. Labor que desarrollan cotidianamente 8 mil 500 barrenderos, 2 mil 11 camiones recolectores, 2 mil 500 choferes, 3 mil 400 ayudantes y 4 mil voluntarios. “Una labor enorme y complicada que en mucho podemos ayudar, aprendiendo a clasificar la basura”, dijo. . Primero a partir de reconocer los desechos orgánicos e inorgánicos, para después clasificarlos y depositarlos en contenedores diferentes, susceptibles de ser reciclados y reaprovechados. “Lo más importante, insistió el especialista, es eliminar en lo posible lo que llamamos basura y en segundo ligar, aprender a depositarlo en depósitos adecuados, y nunca -advirtió-, tirarla en la calle”.