Persiste maltrato a ‘abuelitos’ en Walmart de Félix Cuevas

Ignoran Profeco y la propia empresa Walmart de México quejas de clientes agraviados, sobre todo de la tercera edad.

Lo peor, dicen los afectados, es la actitud de los directivos del supermercado, que simulan atender las quejas de los usuarios pero en realidad solamente solapan a los infractores y “dan el avión” a los ancianos.

STAFF/LIBRE EN EL SUR

El trato despectivo e injurioso de empleados de la tienda Walmart de Félix Cuevas, en la colonia Del Valle Sur de la alcaldía Benito Juárez,  a clientes de la tercera edad, sigue siendo una constante a juzgar por nuevas quejas de vecinos agraviados.

Lo más grave es que en la mayoría de los casos la agresión se debe a errores o torpezas de los “abuelitos” que por su edad y su estado de salud cometen involuntarias equivocaciones.

Y lo peor, dicen los afectados, es la actitud de los directivos del supermercado, que simulan atender las quejas de los usuarios pero en realidad solamente solapan a los infractores y “dan el avión” a los ancianos.

Tal fue el caso de Francisco, una persona de 78 años de edad, a la que el pasado lunes 12 de junio un empleado al que identifican como “asociado” en la tienda, ataviado con un chaleco amarillo con el logo de la empresa, recriminó groseramente el haberse equivocado al tirar un tiquet del cajero automático en una canastilla, en lugar del bote de basura.

El empleado, de nombre Alfonso Salinas (en la foto), se negó siquiera a escuchar los argumentos del anciano, al que luego de recriminarlo simplemente ignoró altaneramente para continuar con sus labores.

El agraviado –vecino de la colonia Tlacoquemécatl Del Valle que vive a tres cuadras del centro comercial–, acudió entonces al área de Atención a Clientes, donde luego de más de 20 minutos de espera logró ser atendido por quien se dijo se la gerente, de nombre Lorena Márquez, la que supuestamente escuchó al quejoso y le dijo que pasaría el reporte respectivo, aunque luego trató de disculpar al empelado abusivo y negó al quejoso toda información adicional. Ni siquiera, por cierto, le solicitó su nombre, para incluirlo en la supuesta queja.

“Yo soy cliente de esta tienda de toda la vida, desde que era De Todo”, argumentó el “abuelito” en balde.

Ante la evidente inutilidad del procedimiento, Francisco optó por llamar al teléfono del corporativo, visible en un letrero del área de Atención a Clientes. Fue atendido por una telefonista amable y respetuosa que dijo llamarse Leticia Galván. Le aseguró que en breve personal del área correspondiente se comunicaría telefónicamente con él… lo que no ha ocurrido 48 horas después.

Las quejas de adultos mayores contra cajeros y otros empleados son frecuentes, originadas sobre todo por el maltrato de que son víctimas al realizar sus comprar u otros trámites, particularmente cuando tienen dificultades o cometen algún error debido a su edad y condición física, como deficiencia visual.   

Otro motivo frecuente de reclamaciones se debe a errores en los precios de los productos y mal estado de los mismos, como a menudo ocurre en las áreas de frutas y verdura, salchichería y lácteos, donde es frecuente que esté ya vencida la fecha de caducidad.

La dimensión de la tienda y su pertenencia a una importante cadena internacional, hace que las quejas se diluyan y que no haya sanciones ni para los empleados agresivos ni para la empresa misma, con que la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) actúe enérgicamente.

Walmart de México y Centroamérica, también conocida como Wal-Mart de México, S.A.B de C.V., es la filial mexicana de la cadena de comercialización minorista estadounidense que Walmart Stores posee en México y Centroamérica, fundada en el año 2000 en la Ciudad de México.

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