Prioriza Esteban Ruiz, en su aspiración a ser el primer alcalde de BJ, ‘extirpar’ la corrupción del PAN
Aunque no descarta la posibilidad de ser abanderado por otra fuerza política con el fin de “sacar al PAN de la demarcación juarense”, Esteban Ruiz Carballido –excandidato a diputado federal y diputado Constituyente— afirma que sería “un orgullo encabezar la planilla del PRI para ser el primer alcalde en Benito Juárez”.
“En el PRI estamos preparados para gobernar en la Ciudad de México y nuestra querida delegación”, comenta en entrevista.
–¿Y si no fuera postulado por el PRI, estaría dispuesto a serlo por otro partido?
–Si se da un escenario de acuerdo con otras fuerzas políticas para sacar al PAN-gobierno de esta delegación, y en caso de que el partido en el que milito no tuviera la sensibilidad para encabezar un proyecto que pueda lograr este objetivo, sí estaría dispuesto.
En ese sentido –dice— la prioridad es “extirpar” la corrupción de ambulantes, permisos irregulares de construcción y giros negros.
Espeta: “El principal líder de la mafia panista en la ciudad y en BJ, como lo ha dicho el periódico Reforma, es el ex delegado Jorge Romero Herrera”, actual coordinador de los diputados del PAN en la Asamblea Legislativa, que como tal goza de fuero y es inmune a la acción de la justicia.
Resuelto a participar Ruíz en esa “cruzada contra la corrupción en Benito Juárez”, a través de las urnas electorales, se planta frente a Romero: “Lo invito a que deje la plaza en manos de los buenos y se retire antes de que lo alcance la justicia”.
En el diagnóstico del priísta, que cuenta 23 años de experiencia en la política y una maestría en Alta dirección de gobierno y políticas públicas, la zona oriente de la demarcación está “olvidada”, y sus 31 colonias carecen de seguridad y están “repletas de ambulantes”, además de que carecen de áreas verdes y espacios públicos dignos, lo que es “intolerable” en la delegación que alguna vez fue “el mejor lugar para vivir”.
“Aspiro a servir a mi delegación desde la trinchera que mi partido político y los ciudadanos crean que soy más apto”, asienta.
“He recorrido las 56 colonias de la demarcación, recogiendo las demandas ciudadanas, desde la corbata (zona como se conoce al extremo oriente de la DBJ, más allá de la calzada de Tlalpan, por tener una forma alargada) hasta la colonia 8 de Agosto (en el poniente). Lo único que pide la gente es que la DBJ vuelva a ser lo que fue”.