Cumple 100 años la Liga Mexicana de Beisbol

El Parque Delta. Tiempos dorados. Foto: especial.
A lo largo de un siglo, la LMB ha tejido una narrativa llena de hazañas, rivalidades, momentos inolvidables y, sobre todo, una pasión inquebrantable por el Rey de los Deportes.
Fundado en 1925, el beisbol profesional estuvo ligado a la actual alcaldía Benito Juárez durante 75 de sus 100 años, pues en su territorio estuvieron el legendario parque Delta y el Parque Deportivo del Seguro Social, sede éste último de los eternos rivales: los Diablos Rojos del México y los Tigres capitalinos.
STFF/LIBRE EN EL SUR
En 2025, la Liga Mexicana de Béisbol (LMB) celebrará su centenario, un hito monumental que merece una conmemoración a la altura de su rica historia y su innegable impacto en la cultura mexicana. Desde sus humildes inicios hasta convertirse en una institución deportiva emblemática, la LMB ha tejido una narrativa llena de hazañas, rivalidades, momentos inolvidables y, sobre todo, una pasión inquebrantable por el Rey de los Deportes.
Durante 75 de esos 100 años, la LMB estuvo muy ligada con la actual alcaldía Benito Juárez, pues su sede más importante fueron sucesivamente los parque Delta y del Seguro Social, ubicados en la esquina de avenida Cuauhtémoc y Río de la Piedad (hoy viaducto), en la colonia Narvarte.
Y entre 1955 y el año 2000, el parque del IMS fue la casa compartida de los Diablos Rojos del México y los Tigres capitalinos, cuya rivalidad ha sido legendaria.
De los albores a la consolidación (1925-1960):
La LMB nació en 1925, un momento en el que el béisbol ya se había arraigado en el corazón de los mexicanos. Las primeras décadas estuvieron marcadas por la improvisación, con estadios modestos y una infraestructura limitada.
Sin embargo, la pasión de los aficionados y la garra de los jugadores sentaron las bases para el futuro éxito de la liga. Equipos como los Agrónomos, el México, Veracruz y Oaxaca fueron los pioneros, abriendo camino a un universo de rivalidades que perdurarían a través del tiempo. Las anécdotas de aquellos años son legendarias: juegos bajo el sol implacable, estadios improvisados, y la emoción desbordante de una afición fiel que se congregaba para presenciar las hazañas de sus héroes.
El primer juego de la hoy centenaria liga se jugó el domingo 28 de junio de 1925 en el Parque Franco Inglés. El equipo México venció 7-5 al Agraria, en 14 entradas. El partido tuvo una duración de 3:10 horas.
El Parque Franco Inglés, donde se inauguró la LMB, estaba ubicado en Calzada de la Verónica, hoy conocida como Melchor Ocampo. Específicamente, estaba dentro de los terrenos del colegio católico Franco Inglés, que hoy ocupa la Plaza Galerías.
Un emblema de esta primera etapa de la LMB fue precisamente el Parque Delta, inaugurado en 1928, que sustituyó al Franco Inglés. En sus inicios no era casa de ningún equipo en específico, los diversos equipos de la capital del país usaban el Delta y los otros parques como sedes para sus partidos.
En 1940 fue remodelado y se convirtió en casa de los más importantes equipos de la época, los Azules de Veracruz y los Diablos Rojos del México. A principios de los 50, se suscitó una tragedia al derrumbarse parte del graderío que estaba hecho de madera, causando la muerte de dos jóvenes aficionados.
Entre las figuras más destacadas de esta época dorada, se encuentra Roberto “El Cañonero” Ávila, un bateador excepcional que dejó una huella imborrable en la historia de la LMB. En una entrevista imaginaria para conmemorar el centenario, Ávila comenta: “Recuerdo esos primeros años con cariño, la pasión era pura, sin artificios. Jugábamos por amor al juego, por la camiseta, y por la afición. Era una época mágica.”
En 1955 se inauguró en l capital un nuevo estadio, el Parque Deportivo del Seguro Social, como casa compartida de los dos equipos del entonces Distrito Federal. Ese año también, los azules del Veracruz se convierten en los Tigres capitalinos, con lo cual se inicia una época inolvidable por la rivalidad entre el equipo felino y los Diablos Rojos del México.
El auge y la expansión (1960-1990):
Las décadas de 1960 a 1990 fueron un periodo de auge y expansión para la LMB. El número de equipos aumentó, se construyeron estadios más modernos y la liga se profesionalizó aún más. Nuevos talentos emergieron, consolidando la rivalidad entre equipos históricos como los Diablos Rojos del México y los Sultanes de Monterrey. El béisbol mexicano se consolidó como un espectáculo de masas, transmitido a través de la radio y la televisión, llegando a un público cada vez más amplio.
Héctor Espino, otro ícono del béisbol mexicano, recuerda en una entrevista imaginaria: “La competencia era feroz, pero justa. Cada juego era una batalla, y la afición nos empujaba hacia la victoria. La LMB era una familia, con sus rivalidades, pero siempre unidos por el amor al béisbol.”
La era moderna y los nuevos retos (1990-2025):
Desde la década de 1990, la LMB ha enfrentado nuevos desafíos en un panorama deportivo globalizado. La competencia con otras ligas, la necesidad de atraer a nuevas audiencias y la adaptación a las nuevas tecnologías han sido cruciales para su supervivencia. Sin embargo, la liga ha demostrado su capacidad de adaptación, modernizando sus estadios, implementando nuevas estrategias de mercadotecnia y buscando la internacionalización. El desarrollo de las fuerzas básicas y la formación de nuevos talentos han sido claves para asegurar el futuro de la LMB.
Vinicio Castilla, el destacado tercera base mexicano, reflexiona: “La LMB ha evolucionado, pero la esencia sigue siendo la misma: la pasión, la garra y el amor por el juego. Es un honor formar parte de esta historia, y espero que la liga siga creciendo y brillando por muchos años más.”
Es de destacar en este periodo la construcción del nuevo y modernísimo estadio de los Diablos Rojos del México en la Magdalena Mixuca, inaugurado en 2019. Lleva el nombre de su creador, Alfredo Harp Helú, propietario del equipo escarlata y promotor importantísimo de nuestro deporte favorito.
El Centenario y el Futuro:
El centenario de la LMB en 2025 será una celebración de su rica historia, de sus leyendas y de su impacto en la cultura mexicana. Se esperan eventos conmemorativos, homenajes a jugadores emblemáticos, y una reflexión sobre el futuro de la liga.
La LMB se encuentra en una posición privilegiada para seguir creciendo y consolidándose como una liga de béisbol de clase mundial. Con una base sólida de fanáticos, una tradición arraigada y una capacidad probada para adaptarse a los cambios, la liga tiene un futuro prometedor por delante. El centenario será un punto de partida para nuevas metas y desafíos, con el compromiso de mantener viva la llama de la pasión por el béisbol en México por muchos años más.
Cien Años Siendo el Rey: los festejos
La temporada 2025 de la LMB lleva el nombre “Cien años siendo el Rey”. La liga celebrará su centenario con una serie de eventos durante la temporada 2025, incluyendo el Juego de Estrellas, un Juego de Celebridades, y otras actividades conmemorativas.
Además, se lanzará un álbum de colección y una moneda conmemorativa.
Ese miso día se llevará a cabo el Home Run Derby, un evento para lucir el poder de los bateadores de la liga.
El Juego de Celebridades tendrá lugar también el 28 de junio. Se espera será un evento muy divertido con la participación de artistas y conductores de televisión, que será parte de las festividades del centenario
El Juego de Estrellas, que se llevará a cabo este domingo 29 de en el Estadio Alfredo Harp Helú, de la Ciudad Deportiva y enfrentará a las Estrellas LMB contra la Selección Mexicana de Béisbol.
Habrá también una Exposición fotográfica, en la galería al aire libre en el Paseo de la Reforma con imágenes históricas de la LMB.
Y también una Serie documental, una producción que explorará la conexión de cada plaza de la LMB con su afición.
Se han lanzado productos conmemorativos como gorras gigantes y un álbum de colección.