Debe el PAN volver a sus principios y reconciliarse con la ciudadanía, dice Jacobo Bonilla; busca la dirigencia del partido en la capital

ADRIANA RODRÍGUEZ

El PAN se ha desdibujado mucho por esa intención de ser camaleónicos, de formar coalición, asegura Jacobo Bonilla, candidato a la dirigencia regional del partido en la capital. “Perdimos nuestra apuesta en las elecciones pasadas. Yo creo que vale la pena que el partido regrese a sus principios, no quiero decir que sea acartonado, pero la gente ya nos conocía y nos aceptaba. Yo creo que hace falta que el partido platique con la ciudadanía porque el PAN está en quiebra”.

Y precisa en entrevista: “Lo que hoy tenemos es un partido que se la ha pasado perdiendo y en el que el grupo de Jorge Romero Herrera gana cada vez que el partido pierde. Tenemos un partido que va administrando las derrotas”.

 

Al cuestionarle sobre los militantes que han abandonado al blanquiazul, asegura que los entiende “porque el PAN ha decepcionado, la dirigencia ha decepcionado. Yo creo que se van por la desesperación o por la circunstancia y no lo siento yo como un acto de traición cuando hicimos una alianza con el PRD, ahí sí mandamos a volar nuestros principios por la alianza”.

Y advierte que se encargará que desde esta fuerza política se vigile el trabajo de Claudia Sheinbaum, próxima jefa de Gobierno, yendo más allá de ser un partido de oposición.

“Yo creo que debemos evolucionar un poco más a la palabra. Muchas veces decir oposición es andar buscando pleito cuando algo no les parece. Yo pienso más en la palabra insistencia en proponer en lugar de andarnos quejando y a su vez, más allá de proponer, se debe exigir porque de otra manera no nos van a hacer caso”.

Advierte luego: “No somos gobierno, pero somos responsables de que la ciudad cambie. Quiero exigir a Claudia Sheinbaum que nos entregue en seis años una policía con preparación y bien equipada. Nosotros formamos parte de un grupo de panistas que nos llamamos Ciudad Ideal a través del cual hemos tenido contacto con el partido Morena”.

Sobre los motivos para presentar su candidatura, externó que hay un pequeño grupo que controla el padrón, liderado por Romero Herrera, que es el que ha tomado todas las decisiones al interior del PAN. “El otro candidato –Andrés Atayde- es dueño del PAN, es una de las cosas que hemos dejado pasar y si no hubiéramos presentado esta candidatura ellos –el grupo de Jorge Romero- pensarían que los queremos mucho porque el panista lo que hizo fue retirarse, replegarse y lo tomaron como una aceptación.”

Militante de esta fuerza política desde muy joven, recuerda que desde niño acompañaba a su padre y desde entonces se inscribía a cursos y diversas actividades del partido. Años más tarde, se convirtió en representante de colonias a los 18 años y después fue consejero ciudadano, asesor en la Asamblea Legislativa y diputado local por Azcapotzalco.

El bastión panista

Benito Juárez es considerado como el bastión panista y para Bonilla es un deber de sus militantes hacer que sea el mejor gobierno de la ciudad.

Y acepta que uno de los principales problemas en la alcaldía es el llamado boom inmobiliario en el que, dice, cada constructor se escuda en la ley para construir y ampararse.

“Los usos de suelo no están actualizados a la realidad, se permiten usos de suelo de manera general, pero las colonias no pueden aceptar tal cantidad de vehículos.”  Para detenerlo, agrega, habría que trabajar con los diputados y los concejales.

Expone que el trabajo de los panistas en Benito Juárez es hacer las paces con la ciudadanía. “Muchos creen que el gobierno de Benito Juárez es de los panistas y no es así, es de todas las personas que habitan ahí. Hemos tenido varias veces el gobierno en esta demarcación, pero nunca nos hemos puesto como meta que sea el mejor gobierno”.

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