Hay alarma en el clan de Jorge Romero: El PAN en el DF cae al cuarto lugar en preferencias electorales, según encuestas
Estudios sobre preferencias electorales en la capital, realizados aún antes del escándalo de los ex funcionarios de la Delegación Benito Juárez detenidos en Brasil por manosear a una mujer y golpear a su esposo, ponen ya al PAN en un lejano cuarto sitio, por debajo del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) de Andrés Manuel López Obrador, que estrena registro posicionado en el tercer lugar.
Efectivamente, de acuerdo con una encuesta de la empresa Varela y Asociados, publicada el pasado 9 de julio en el periódico El Respetable DF, Morena cuenta con el 15% de las preferencias electorales para diputados federales, mientras que el PAN tiene el 14%. A la cabeza se mantiene el PRD, con el 44% y en segunda posición el PRI (21%). Por si fuera poco la “mala” o “muy mala” imagen del partido albiazul alcanza el 47% de las opiniones.
“Un evento que no recogió la encuesta (se levantó del 7 al 9 de junio) fue el de los panistas detenidos en Brasil, cuyo proceso legal ha estado registrado en medios de comunicación”, aclara Carlo Varela, director de la empresa encuestadora. “Posiblemente la imagen del PAN sólo tienda a empeorar por el involucramiento militantes activos e inclusive de autoridades”.
Otras encuestas recientes ya ponían al PAN como actual perdedor incluso en la Delegación Benito Juárez, otrora su bastión. Una de ellas, dada a conocer en mayo pasado por Roberto Zamarripa, director de información nacional del periódico Reforma, revelaba que el albiazul sería en ese momento segunda fuerza en el terruño juarense, con apenas 24 por ciento de las preferencias electorales.
En el 2012 la candidata del sol azteca, Leticia Varela, se quedó oficialmente a sólo 700 votos de vencer a Romero, aunque el Instituto Electoral local no le permitió el recuento de votos, con lo que quedó la duda.
La debacle electoral del PAN en el DF enciende la señal de alarma en el clan autodenominado Los Ocean, encabezado por el delegado panista Jorge Romero Hererra, que es a la vez jefe del grupo político que mantiene el control del PAN capitalino. Antes de que se vuelva pública una debacle mayor, donde se refleje el impacto de los escándalos provocados por sus funcionarios en Brasil y de los integrantes de su clan que han participado en chats con expresiones misóginas, racistas y homofóbicas, Romero ya ordenó invadir las calles, como nunca antes, con su conocida propaganda de plástico contaminante, en la que promueve acciones de índole populista como el apoyo a “madres solas” y clases de inglés.
Al tiempo, sus dos precandidatos a sucederlo en la jefatura delegacional (él lo decidirá a fin de cuentas, como jefe de facto del partido), Santiago Taboada y Christian Von Roehrich, se han puesto muy activos en la promoción de su imagen de cara al 2015 (¡un año antes de las elecciones!), el primero con una franca promoción adelantada en la que aparece en espectaculares azul y naranja, los colores emblemáticos del PAN, sin que ni siquiera aparezca como motivo algún “informe” de actividades.
En cambio los anuncios, que llevan la foto enorme del rostro del diputado y han sido colocados lo mismo en vallas publicitarias de la colonia San José Insurgentes que en espectaculares sobre la avenida Cuauhtémoc, justo en medio del escándalo de los detenidos en Brasil, sí incluyen un eslogan de campaña: “Vamos Santiago Taboada”. Y una leyenda que parece broma ante la creciente protesta vecinal por la desatención en la procuración de servicios y el ‘boom’ de construcciones irregulares, de la que Romero no ha demolido una sola, como prometió: “Sigamos mejorando Benito Juárez”, ponen.