Busca Reyes Gámiz, ex líder de Congreso de CDMX, ser ‘tercera opción’ en Miguel Hidalgo
FRANCISCO ORTIZ PARDO
Una propuesta que atienda con sentido de realidad los problemas que aquejan a los vecinos de la Alcaldía Miguel Hidalgo, y que se en ponga en medio de los extremos de Acción Nacional y Morena, es lo que plantea Carlos Reyes Gámiz, ex diputado federal y ex presidente de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal.
“Yo lo que propongo es algo sui generis, una tercera opción”, sintetiza Reyes Gámiz en entrevista por video.
Considera que, pese a sus aciertos, el actual alcalde Víctor Hugo Romo –quien busca la reelección por Morena–, debe cerrar su ciclo que ha durado 12 años gobernando en diferentes momentos la demarcación, pues no representa ya el legítimo interés de los vecinos de Miguel Hidalgo, sino una política clientelar desgastada.
“Romo ha tenido la oportunidad de ser un actor determinante en cosas positivas”, reconoce. “Pero es tiempo de optar por nuevas políticas, donde los recursos se destinen a la transformación de realidades y no al clientelismo y las dádivas”.
Desde esa aspiración como precandidato del Partido Encuentro Solidario (PES) a la Alcaldía MH, según explica el político michoacano de 51 años de edad, vecino con arraigo en la zona de las Pensiles, Tacubaya y Tacuba de la demarcación, es que pretende refrendar una posición de “izquierda realista”.
“Entre el PAN y Morena hay aquí una disputa muy fuerte”, detalla el ex perredista. “Si logramos colocar en medio de eso una propuesta de proximidad con la gente habremos de cambiar la percepción que se tiene acerca de la participación ciudadana en los procesos electorales”.
Reyes Gamiz es licenciado en Economía por la UNAM y tiene un máster en Gestión de Ciudades Globales den la Universidad Oberta de Cataluña. Fue presidente de la Asamblea Legislativa en el 2004 y, como diputado federal, vicecoordinador de la fracción parlamentaria del PRD en el 2013. Más recientemente, en el 2018, fungió como director general de Ingresos del gobierno del Estado de Michoacán.
Se alejó del PRD, cuenta, porque dicho partido se acercó demasiado al PRI y al PAN y sufrió una crisis de identidad cuando el Pacto por México; aunque reconoce que sí apoyo reformas con las que estuvo de acuerdo, particularmente la Educativa y la relativa a las Telecomunicaciones. No estuvo de acuerdo, en cambio, con la reforma hacendaria y la energética.
“Yo he pensado a la política como un instrumento de cambio”, dice. “Y trato de aportar iniciativas en la época y el espacio que me ha tocado vivir”.
Lo que imagina como “la tercera opción” es aquello que ponga a Miguel Hidalgo –el segundo municipio más rico de México pero con enormes desigualdades— “en otra posición frente a la ciudad”.
