‘No debemos pagar los platos rotos’, dice Paulina Cobos, candidata del PRD a diputación por BJ
STAFF/LIBRE EN EL ASUR
Paulina Cobos afirma orgullosa y sonriente que es ella, y no otra, la candidata más joven a una diputación local en toda Ciudad de México. Aún se le nota con el cubrebocas, que trae estampado el emblema del sol azteca, pues inevitablemente se le estrechan sus ojos grandes al decirlo.
Efectivamente, la aspirante a diputada por el distrito 17 local (Benito Juárez) tiene apenas 23 años. Pero no la amilana la falta de experiencia que solo dan los años. Al contrario, presume que es una persona preparada y representa el “cambio generacional” en la política y en el ya longevo PRD.
Además, dice, desde temprana edad, siempre me ha interesado participar en procesos que tengan que ver con la vida pública de mi entorno por medio de la participación ciudadana, que es fundamental para la reconstrucción del tejido y desarrollo social”.
Nació aquí, en BJ, y es ingeniera económica y financiera. Cuenta con varios diplomados en matemáticas y habla tres idiomas. Dice que aceptó registrase en el PRD “porque estoy convencida de que este partido de izquierda progresista verdaderamente saco adelante a nuestra ciudad, desde la estabilidad económica y social, hasta el control de la inseguridad, dejando huella nacional e internacional como una CDMX de derechos y libertades”.
Paulina comenzó “brigadeando” por el PRD cuando era una niña, en el 2009. Reconoce que todos los partidos han cometido errores, pero asevera que los del PRD “no se comparan” con los de los actuales gobiernos federal y de la capital. Y justo eso es lo que la he empujado a participar en la contienda, para demostrar además que no pertenece, como suele decirse a una “generación de cristal”.
Y ahora, dice “¿por qué tenemos que pagar nosotras los platos rotos por todo lo mal hecho en el pasado?”, con el medio ambiente tan afectado y sin futuro en materia de empleos. Destaca que el PRD “no separa a la sociedad en dos, sino que postula la unidad para que las cosas mejoren”. Por eso, dice, “estoy aquí”.
