Ciudad de México, octubre 14, 2024 17:42
Gastronomía

Abandona gobierno de BJ la Plaza Valentín Gómez Farías, en Mixcoac, cuya restauración costó 5 millones de pesos

Los bolardos rotos, tirados en el suelo, a la orilla del paso de autos, anuncian el abandono en que el gobierno de Jorge Romero Herrera tiene la Plaza Valentín Gómez Farías, en la colonia San Juan Mixcoac. Fue restaurada apenas en el año 2011, con 5 millones de pesos, autorizados ex profeso por la Asamblea Legislativa del Distrito Federal. Y ya da pena.

A la nula promoción cultural por parte del actual gobierno, así como el palpable deterioro en los parques a lo largo y ancho de la demarcación, se suma la indolencia que lleva a la rápida destrucción de este espacio, frente al cual está la casona donde creció el poeta Octavio Paz. Ni siquiera el centenario del nacimiento del insigne Nobel de Literatura, festejado en marzo pasado, animó a Romero a resguardar el lugar en forma ordenada y limpia.

Hay 10 luminarias, más de la mitad, fundidas; y dos bancas rotas. En las esquinas se acumula la basura que irresponsables visitantes y vecinos dejan allí, sin que nadie recoja. El mármol del mismo tipo que el que luce magnífico en la Alameda Central está acá mugroso y pegajoso, con la evidente huella de que no se ha limpiado en meses; y ya tiene fracturas…

Además de la casa de Octavio Paz, en ese entorno histórico se encuentran el templo de San Juan Evangelista y Nuestra Señora de Guadalupe, que data del siglo 18, así como la mansión donde vivió e ideólogo liberal Valentín Gómez Farías; pero nadie controla los desvaríos estéticos de quienes ponen sus macetas a contentillo ni impide que se pongan vendedores de fritangas los fines de semana.

Fernando Rodríguez Doval, actual diputado federal panista, atendió en el trienio anterior, como legislador local, la petición de un grupo de vecinos, encabezados por Leticia Calderón Chelius, investigadora del Instituto Mora de estudios sociales, para salvar del olvido la plaza y hacerla resurgir. Su gestión logró la adquisición de cinco millones de pesos, que fueron utilizados por la DBJ para restaurarla bajo el proyecto de la Autoridad del Espacio Público del gobierno capitalino.

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